Eramos varios los que tocariamos está noche. Distintas bandas se habían reunido para poder recaudar fondos para una fundación que nos había ofrecido tocar.
Mi equipo y yo no nos negamos, al fin y al cabo no necesitábamos tanto el dinero por el concierto, preferíamos que fueron a una mejor razón. Después abriríamos más fechas para conciertos al fin y al cabo.
Terminamos de tocar y fuimos al camerino que nos habían asignado a los cuatro. Eramos Jack, Eugene, Nick y yo. Consideramos que no hay un jefe en la banda, cada quien daba lo suyo y entre todos creamos las canción para los nuevos álbumes.
-¿Qué les parece que el nuevo álbum sea de desamor? Todas tan tristes como para deprimirse por días -no llevábamos ni un mes que habíamos sacado un nuevo sencillo y ya nos encontrábamos pensando en el nuevo.
-¿Y que Hiccup se deprima más? Safo -dijo Jack.
-¿Deprimirme? Si yo estoy bien
-Amigo, te conocemos y sabemos que tal vez lo de Astrid te dolió más de lo normal.
-¿Pero será está ya la definitiva? Siempre terminan y vuelven, terminan y vuelven. Maldito ciclo vicioso.
-Creanme, está es la definitiva. Después de todo, yo fui el que la encontró con el otro -me hundí en mi sillón.
-No te deprimas amigo, vas a encontrar el amor -se acerco Nick. Para el era fácil, un día en la calle caminando encontró a Juddy y ahora están a solo meses de casarse.
-¿Qué tal si la encuentras en el grupo de fans que vendrán a vernos?
-¿Salir con una fan? Que aterrador
Antes de que mis amigos pudieran responderme, una voz grave tocó nuestra puerta.
-Vayan alistándose, sus fans irán a verlos en donde habíamos quedado.
-Si si, en un momento vamos.
Caminamos a una habitación llena de cojines para acomodarnos en el centro. No odiabamos a nuestras fans, era bueno interactuar con una que otra de vez en cuando.
La puerta se abrió y pudimos ver cómo a 15 chicas afortunadas que habían ganado el sorteo para vernos. Todos muy amables nos saludaron y tomaron asiento, bueno, casi todas. Vi a una pelirroja que no pasó a saludarnos y fue directamente a sentarse en el sillón con indiferencia para que después, seguro su amiga, se sentará con ella.
Comenzaron las típicas preguntas y respuestas pero mi mirada jamás salió de ella. Parecía que odiaba estar aquí, al momento que le tocó a ella preguntar, decidió que la saltarán. Acabo la hora de estar con ellas y nos dedicamos a la sesión de fotos, dónde ella jamás se tomó una por su cuenta. Nos juntaron a todos los de la habitación para una foto grupal y ella se puso conmigo en la esquina mientras una rubia la abrazaba con emoción.
Cada chica comenzó a despedirse de nosotros para salir de la habitación.
-Pero que chica -susurre para mí mismo cuando ya todas se habían ido.
-¿Que chica? -pregunto Eugene acercándose.
-Habla de la pelirroja, jamás quito su vista sobre ella. Parecía un león cazando un pequeño conejo -dijo Nick para reírse.
-Claro que no, solo se me hizo interesante. Es todo.
-Interesante, ¿eh? -dijo Jack riéndose- ¿Entonces no te molestaría hablar a solas con ella? ¿O sí?
-¿A qué te refieres? -pregunte nervioso.
-Como vimos que no le quitabas el ojo, le dijimos al gorila si le podía decir al final que se quedará un momento.
