004. Pijamada. Merida

642 29 0
                                    

- Ya llegamos Merida - Hablo Rapunzel abriendo la puerta de su mansión.

- Woow - Hable dejando caer mi maleta.

Rapunzel y yo tendríamos una piyamada. Su padre este fin de semana estaría. Nunca lo eh visto por que está en los negocios. Entonces escuché a alguien bajando las escaleras. Voltee a ver y era el papá de mi amiga. Dios mío es el hombre más sexy que eh visto en mi vida.

- Hola papá - Fue Rapunzel a abrazarlo.

- Rapunzel - Le correspondío al abrazo.

- Mira papá ella es Merida. La amiga que siempre te hablo. - Hablo.

- Hola Mérida. Espero que te la pases bien con nosotros. - Me sonrió con esos hermosos ojos esmeraldas que trae.

- Gracias señor - Le sonreí.

- Llámame Hiccup. Señor me hace sentir viejo. - Me sonrió.

El día pasó mientras que mi amiga y yo nos divertíamos. Llego la noche y nos dormimos. Entonces algo en el pasillo me despertó. Moví a Rapunzel y no me respondió. Me levanté y tome mi celular para prender la lámpara y salir a investigar. Baje las escaleras y fui a la cocina y pude encontrarme al papá de Rapunzel sacando algo del refri. Carraspe para llamar su atención y me recargar en la pared.

- A este hola Merida - Hablo dándose la vuelta completa.

Me acerque a el. A quien engañó era perfecto para mi aunque fuera mayor que yo. Empecé a acariciarle el brazo con delicadeza.

- ¿Qué haces Merida? - Se apartó de mi.

Me acerque a el nuevamente para accoralarlo en el refri.

- Solo déjate llevar - Le susurré en su oído.

Empecé a besarlo pero al cabo de unos segundos el me siguió la corriente. Era un beso tranquilo, y delicado.

- No espera - Se separo - Esto está mal. Eres la amiga de mi hija al igual eres menor de edad. Me doblas la edad. Me podrían demandar su alguien se llega a enterar.

Lo empecé a besar de nuevo "Nadie se va a enterar de esto" le susurré mientras esto pasaba. Creo que entendió por que me tomo de los glúteos y me subió a la barra despachadora. Se puso en medio de mis pies para tener más accebilidad a mi. Empezó bajando a mi cuello para poder besarlo con cuidado. Lo tome de su cabello para darle más accesibilidad. Paso sus manos por debajo de mi pijama para darse cuanta que no traía nada.

Empezó a masajear lentamente mis pechos conforme al ritmo que hibamos. Saque exalaciones por todo esto. Empezó a subir mi playera dejándolos un poco al descubiertos. Me la quito dejándome semidesnuda. Se acercó a ellos para poder hacer lo que su boca quisiera hacer." No puedo creer que el papá de Rapunzel me está asiendo esto". Raios pero si lo hace bien. Alzó su mirada y se me quedó viendo.

Lo abrace mientras lo besaba pegandome a el.

- Merida no podemos hacer esto aquí. - Hablo en esto.

- Llévame a donde quieras - Susurré.

Nos separamos y me dió mi camiseta. Me la hiba a poner pero me lo negó. Me tomo de la mano y salimos caminando hacia el patio a una casa del árbol. Empezamos a subir hasta llegar a arriba. Al estar adentro el cerro con candado. Me destape quedando como antes.

Se acercó a mí acorralado me en la pared de madera. Me empezó a besar fuertemente mientras me tocaba. De un momento para el otro estábamos en el suelo.

Empezó a desabrocharse el pantalón enfrente de mi. - Debemos de hacer esto rápido. Rapunzel se puede dar cuenta de tu ausencia. - Asentí.

No sabía que podía llegar tan lejos con un hombre mayor. Suertemente no soy virgen. La perdí el año pasado con mi novio. En una fiesta de disfraces. Ahí fue cuando nos conocimos.

Empezó a bajar mi shorts al igual que mis bragas dejándome al descubierto.
Se empezó a acercar a mi lentamente. No podía negarlo estaba nerviosa.

- ¿Estás lista? - Pregunto. Puse mis manos en sus hombros. Asentí cerrando los ojos.
Lo metió rápidamente que hizo sacarnos a los dos un suspiro.

Empezó hacer su rutina de todos los hombres mientras que yo... Vamos no puedo negarlo lo estaba disfrutando. Mientra me tomo de las manos y me empujaba para poder penetrarme. Empeze a sacar gemidos de mi boca por medio el me penetraba, encurve mi espalda

- ¿Te gusta eso? ¿eh? - Susurro con una voz entre cortada.

De mi parte no podía responder a su comentario, mi boca no podía cerrarla de todos los sonidos que me provocaba y tenía una forma de O.

Varios minutos Hiccup empezó a ser más salvaje, sus movimientos fueron más fuertes y rápidos conmigo. En ningún momento de la acción mi boca dejo de hacer gemidos y mencionar su nombre en ningún momento.

Entonces pasaron ya varios minutos que el orgasmo llegó para ambos y a los minutos sentí como el líquido de Hiccup chocaban contra las paredes de mi cuerpo.

- Eres maravillosa en esto. - Susurró colocándose en mi pecho escuchando mi respiración.

~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~~

- Buenos días princesa. - Hablo Hiccup acercándose a Rapunzel dándole un beso en la mejilla.

- Hola pa' - Sonrió la chica para seguir desayunando.

- ¿Como durmieron anoche? - Hablo para sacar una mirada seductora a Mérida.

- Muy bien señor Haddock. - Sonrió Mérida.

- Así es papá, cosas de chicas.

¿Lemonlandia Mericcup?Donde viven las historias. Descúbrelo ahora