Caminas por las calles más sucias sin darte cuenta que tus hombros golpean a los fantasmas que no estaban listos para irse, golpeaste mi hombro dos veces, pero no quiero hablar de eso. Silenciosamente te hago creer que todo es tu culpa, y tus amigos te ayudan a creer que no es así, pero las margaritas se han secado y dices volver a verme en cada espejo, tu sonrisa siempre fue más fuerte que yo, los pedazos de mi corazón están en tu patio, encendiendo la fogata que cuidaste. Prometiste que estarías aquí cada semana, pero no quiero hablar de eso. ¿Cómo le explico al corazón que la pasión no debería sentirse así?, ¿cómo le digo al amor que le escriba un nombre a lo que estoy sintiendo?
Tengo que pedirle disculpas a mi corazón por toda la sangre que derramó y las promesas que lo hicieron romperse, por ver como un hombre lo incendia en una linda noche estrellada, porque todas las noches son lindas para ti, desde que ya no estoy, desde que mi corazón ardió.
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Los poetas malditos nunca mueren IV
PoetryLos poemas que te escribí son aquellas razones por las que viví, ahora que he escrito suficientes, me pregunto si algún día los leerás para mí...