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El olor a comida me despertó, abrí los ojos y vi que mi mano estaba entrelazada con la de Hassan.

-ya vengan a desayunar- hablo Mildred. Natanael pego un brinco de el sillón y luego luego corrió para la cocina.

Hassan abrió los ojos y yo quite mi mano de la de el y camine a mi cuarto. Entre a el baño y me lave la cara y los dientes. Cepille mi cabello y ahora sí salí a desayunar.

Ya todos estaban sentados en la mesa, yo me senté al lado de Mildred, de nuevo enfrente de Hassan.

-¿Porque se quedaron?- pregunté

-no ps si quieres nos vamos alv- me dijo Oscar y yo rei

-no cuál, ahorita se van a poner a recoger- los cuatro rieron.

-ay morra, no seas culera. Mejor vamos al antro- me dijo

-¿Tu vas a pagar?- Natanael hizo una gran sonrisa

-ta bien pues. Pero nomás pago lo tuyo y lo Mildred- aclaro, Nata saco el dedo y siguió comiendo

-pero antes tengo que ir con Axel- dije el asintió.

Al terminar de comer comencé a hacer el quehacer. Junior dijo que tenía cosas que hacer y se fue al igual que Oscar.

-¿Tu no te vas?- le pregunté a Hassan

-¿Quieres que me vaya?- "¿Cómo le digo que se quede sin decírselo?".

-pues supongo que sí vienes con Mildred ella te lo dirá- Me encogí de hombros y el solo se sentó en el sillón junto con Natanael y Mildred los cuales jugaban con la consola.

Comencé a barrer, tenía mucho sin hacerlo y pasear de eso no estaba sucia mi casa. Al terminar trapee y después limpie la cocina.

-Maly, ¿Quieres que te ayude en algo?- pregunto Hassan. Yo estaba de espaldas

-no, gracias- respondí sin verlo

-sabes que no vengo con Mildred, vengo contigo- escuché como dió unos pasos hacia mi

-ya te lo dije Hassan, no me interesa-

-mirame a los ojos y dime qué no te intereso- se acercó a mí. Sentía su respiración. Puso sus manos en mi cintura y me dió la vuelta- dímelo- susurro

-no me interesas- dije.

-pero veme a los ojos-

-no puedo, Hassan. Perdón- salí de la cocina y me encerré en mi cuarto.

Entre a en baño y me bañe rápido, me cambié y seguí acomodando mi closet y algunas cosas que estaban fuera de su lugar.

Mientras acomodaba unas cosas que estaban fuera de su lugar una hoja se movió. La tomé y la voltee, era el dibujo que había hecho hace unos años de Hassan. Estaba horrible.

Lo rompí y lo puse en el bote de basura, tenía mucho sin dibujar o pintar. Y luego miré alrededor. El color de mi habitación no me gusta.

Tome el celular de servicio que había para llamar a recepción.

-hola, buenas tardes, una pregunta. ¿Se puede alterar la decoración del departamento?-

-hola, buenas tardes. Si, es libre ese aspecto - di las gracias y colgué. Tome algo de el dinero que tenía y tome las llaves de mi camioneta.

-ven Mildred, nos vamos- les dije, Natanael y Hassan me vieron con confusion

-¿Ellos vendrán?- me preguntó Mil. Maldita sea Mildred, te amo pero porque tenías que preguntar eso

-supongo que si quieren, si pueden venir- Natanael tomo su gorra

-ya que insistes si iremos contigo- dijo Nata y abrió la puerta

-vieras cuanto-

-luego nos extrañas- rodé los ojos y los cuatro salimos. Mildred y Nata se subieron atrás y Hassan de copiloto.

-ey morra, perdón por lo de hace rato. No quería incomodarte- se disculpo Hassan- perdón por acercarme así.

-no dije que me incomodara- respondí sin mirarlo, supe que sonreía.

-¿Vamos a comer?- pregunto Nata

-no mames, acabas de comer cabron. Amarrate la tripa alv- le dijo Hassan. Yo rei

-no, vamos a comprar pintura para pintar mi casa. Ustedes me van a ayudar- dije. Nata se quejo pero asintió.

Al llegar a la tienda compré pintura blanca, ahorita la apareces eran rojas y naranjas y no me gustaban para nada. Además mis muebles eran grises y no combinaba en nada.

Y siento que de blanco todo se ve mejor, solo que se ensuciara más rápido y tendre que estar pintando más seguido.

Hassan y Nata subieron la pintura a la cajuela mientras yo compraba brochas y platico para cubrir todos los muebles. No quiero que se manchen y nata está tan pendejo que es capas de pintar la tele.

Al llegar a mi casa comenzamos a forrar todo de plastico, también el suelo lo cubrimos bien.

-ey morra, ¿Todo va de blanco?- pregunto Hassan, yo sentí. El se acercó. - se que se va a escuchar raro, pero no tienes ropa que me presentes?. Está se va a manchar y es nueva.

-ay señor vanidoso- rei- ven- caminamos a mi cuarto - según yo todavía tengo algunas playeras que eran tuyas

Abrí mi closet y comencé a buscar la ropa, no tenía algunas. Tenía demasiadas, casi toda la ropa de Hassan y de Natanael se había quedado en mi casa y por algún extraño motivo no quise deshacerme de ella. 

-toma- se la di, también le di un short, ese era de Max

-morra, este no era mío-

-lo se, era de mi novio-

-¿Tuviste novios?- pregunto mientras e quitaba la sudadera

-algo así, fue casi algo, de echo solo dormimos juntos - respondí

-mmm, yo nunca dormí con nadie más-

-¿Felicidades?- respondí fingiendo desinterés, de verdad me alegraba saber que después de mi no hubo otras. Aunque no le creo del todo.

-te dejo para que te cambies. Yo también me voy a cambiar- tome un short que había ahí con una blusa que no usaba y entre a el baño. Me cambié rápido y me amarre el pelo.

-Nata, ¿Te quieres cambiar?- le pregunté, el asintió y corrio a mi cuarto para cambiarse.

Hassan y yo salimos de la habitación y comenzamos a destapar las cubetas de pintura y las brochas.
Empezamos por unas paredes, después pintariamos el techo y lo demás.














































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Aquí el de hoy😘

𝐎𝐩𝐨𝐫𝐭𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 // 𝐇.𝐋Donde viven las historias. Descúbrelo ahora