𝐎𝐩𝐨𝐫𝐭𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 // 𝐇.𝐋

27

-oye, Maria estas manchada- me habló nata

-¿De dónde?-

-de aquí- con su mano llena de pintura me tocó la cara y me dejó toda la puta cara de banco

-¡Vas a ver Natanael!- le grite y tome mi brocha para empezar a corretearlo por toda mi casa

-era broma!- grito, Hassan solo reía

-tu de que te ries pendejo- le avente la pintura que era para Nata a el. Quedó todo lleno de blanco, igual que yo

-no mames Malya, yo no jugaba alv- Hassan se levantó con las dos manos llenas de pintura y ahora eran ellos los que me correteaban. Mildred solo reía.

Natanael le aventó pintura a Mildred mientras Hassan me hacía cosquillas y me llenaba toda de pintura

-¡Ya!- grite mientras reía

-no cuál ya, ve como me dejaste alv- Hassan tenía todo el cabello tieso, pues la mayoría había caído en la cabeza

-¡Ve como está el mío!- le dije, mi cabello también estaba lleno de pintura. Derrepente Natanael estaba completamente lleno de pintura.

Las manos de Hassan no me dejaban en paz, el me veía distinto. No puedo explicar cómo me veía.

Me veía demaciado lindo, sus ojos siempre brillan con aquella linda sonrisa. Como pude acerque mi mano para quitarle algo de pintura que tenía cerca del labio.

Las cosquillas de Hassan pararon, pero se acercó un poco más a mi. Antes de que puedas hacer algo yo me incline hacia atrás y me levanté rápido.

-Morra, ¿Me puedo bañar?- me preguntó Nata, literalmente lo único que no tenía pintura de el eran sus ojos

-no mamen, primero vamos a el patio alv- empecé a caminar y los tres me siguieron hasta el patio y comenzamos a enjuagarnos con la manguera.

-mira, mira- Natanael hizo como si patinara, pues como el suelo esta mojado estaba resbaloso. Avente algo de jabón y comenzamos a resbalarnos.

Parecíamos niños de 6 años jugando en un parque de diversiones. Hassan se resbaló y se cayó, pero me llevo con el.

Con mis pies accidentalmente tire a Nata y el se pego con la lavadora. Y reí. El baboso se sobó la cabeza.

No nos podiamos bañar así o dejaríamos todo mi baño manchado, cuando acabamos de quitarnos la pintura fui por unas toallas para secarnos. 

-tengo frío alv- Nata se quitó la camisa y se seco bien con la toalla, Hassan hizo lo mismo.

Yo mi quite la camisa quedando únicamente en ropa interior pero me cubrí con la toalla, ya envuelta en la toalla me recosté en el sillón al lado de Hassan, era algo incomodo por el sillón, el cual seguía cubierto de plástico.

Estábamos viendo un programa de la tele, para ser sincera nisiquiera le estaba prestando atención. Solo me concentraba en las caricias que Hassan estaba dejando en mis muslos.

Me levanté de el sillón y camine hacia los muebles para comenzar a quitar los plásticos, tape los botes de pintura que sobraron.

Mientras Hassan, Natanael y yo quitabamos los plásticos y limpiabamos la casa Mildred hacia la comida.

Al terminar nos sentamos en la mesa y Mildred nos sirvió de comer, más bien era medio cena porque eran las 8 de la noche. Se nos pasó tan rápido el día que nisiquiera tuvimos noción del tiempo mientas jugábamos.

Al terminar de cenar yo camine a el balcón que había en cuarto y me senté en una de las sillas. Encendí un cigarro y mire la Luna. Estaba preciosa.

De pronto abrieron la puerta, no quise voltear. Pues era obvio que era Hassan, se sentó en la otra silla no sin antes acercarla a la mia y no dijo nada.

-Ey Malya- me habló Hassan después de un rato- ¿Ya estamos bien?- pregunto con algo de temor en su voz

-aún no lo sé Hassan. Por más estúpido que suene, te tengo miedo- no podía verlo. Sentía algo de enojo aunque no se de dónde salía o que lo provocaba, sentia tristeza y alegría mezcladas.

-Malya. ¿Podemos hablar sobre lo que pasó aquella noche?- dude, demaciado. ¿Y si no es lo que quiero escuchar? - por favor. Dame una Oportunidad - asentí. Después de todo quería saber su parte de la historia.

-recuerdas que el Rey me mandó a llamar?. Cuando llegamos nos dijo que debíamos irnos, que no nos quería cerca de ti- yo de inmediato voltee a ver a Hassan- el dijo que éramos una distracción para ti y tu para nosotros. Obviamente Nata y yo nos negamos a hacer eso, nos dijo que como sabría que no hibamos a querer tenía que tomar "medidas drásticas"- yo no podía creer eso.

-¿Que fue lo que les dijo?-

-dijo que si no nos hibamos te hiba a matar. Nata y yo le dijimos que no queriamos- mis ojos se llenaron de lágrimas- nos amenazó, si te decíamos una sola palabra de esto nos hiba a matar a ambos. El dijo que tenía que asegurarse de que el contacto contigo ya no existiera, tomo nuestros celulares y los rompió.
Natanael y yo seguíamos negandonos y nos mandó a golpear, nos golpearon por vario tiempo hasta que tuvimos que aceptar. Nos dió dinero y nos mandó a los Angeles, dijo que no nos quería volver a ver hablar contigo o estar cerca de ti-

-yo, no tenía ni idea de eso Hassan- me sentí arrepentida. El no había tenido la culpa de nada

-no te culpo, yo abría actuado de la misma forma que tu-

-me siento como una estúpida- el río,

-no digas eso- con su mano limpió las lágrimas de mis mejillas- tu no tienes la culpa morra, yo debí de haberte dicho eso. También quiero pedirte perdón por lo de el otro día, claro que te merecías las explicaciones. Estaba molesto contigo por qué le dijeron que te habías drogado, ¿Porque hiciste eso?

-queria olvidarme de ti- le dije mientras apagaba mi cigarro

-no andes haciendo eso no mames, me asuste cuando me dijeron que habías echo eso y me moleste cuando supe cuáles eran las consecuencias de esa mamada que te metiste- yo rei- cambiando de tema. ¿Que paso con Alondra?, ¿Ya no la volviste a ver después de que me fui?

-¿Quien es Alondra?- pregunté confundida, no recuerdo a ninguna Alondra

-no mames morra- Hassan pelo los ojos asustado- Alondra, tu amiga la morenita. Por estarte drogando no mames-

-de verdad, no recuerdo ninguna Alondra- le dije

-ay Dios mío. Aún con tu memoria de disco rayado te quiero- me dijo mientras sonreía. Yo rei y aparte mi mirada. Afortunadamente por la oscuridad no se veía que me había puesto toda pinche roja

"De verdad extrañe a este hombre"

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Uyuyuy, ya se reconciliaron pa q no los extrañen juntos.