𝐎𝐩𝐨𝐫𝐭𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 // 𝐇.𝐋

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Narra Hassan~

-¿Dónde está Malya?- llegó Antonio con Natanael, Oscar, Gabito, Luis, Lenin, Lein y Adriel

-entro a cirugía- dije, mis manos temblaban y mi ropa estaba manchada de su sangre.

-¿Dónde le dispararon?- me preguntó Natanael.

Cabe recalcar que todos estaban enojados conmigo porque el chismoso pendejo de Nata contó lo de la pelea y lo que dije de Maly.

Obviamente lo dije sin pensar, yo no pienso así sobre ella y claramente tampoco es mi hijo el bebé de Natalia.

-en el abdomen- nadie sabía sobre el embarazo de Maly, solo Natanael y yo. El me miró algo sorprendió y paso sus manos por su cabello.

Mi respiración se agitaba cada ves más y la desesperación me invadía demaciado rápido.

Cada segundo era como una hora y yo ya no soportaba no saber nada de Malya.

Pasaron alrededor de 2 horas y no llegaba ninguna noticia sobre ella.

Natanael estaba comiendo, Luis y Lenin estaban medio dormidos en las sillas de la sala de espera, Junior caminaba de un lado a otro y preguntaba cada 5 minutos por su hermana.

Adriel solo se cruzó de brazos mientras Lein estaba mordiendose las uñas.

Una enfermera se acercó a nosotros y todos nos pusimos de pie de inmediato.

-familiares de la paciente Malya Herrera-

-soy yo- se acercó Toño de inmediato- ¿Cómo está?- pregunto con algo de desesperación

-la paciente se encuentra bien, hubo algunas dificultades en la cirugía y por eso nos tardamos- todos liberamos el aire que habíamos tenido acumulado por todo este tiempo. Natanael y yo nos miramos con algo de duda respecto a el bebé

-Hicimos todo lo que pudimos para salvar al feto pero fue imposible, la bala perforó una de sus extremidades y murió de inmediato-

No...

-¿El que?- pregunto Toño

-la paciente tenía 18 semanas de embarazo, el bebé no sobrevivió- todos me miraron rápidamente- lo siento- la enfermera se retiró y Toño se lanzó contra mi

-¡Eres un hijo de puta!, ¡Embarazaste a mi hermana y después le pusiste los cuernos!-

-asi no fueron las cosas- le dije intentando apartarlo de mi

-ey, no es el lugar para hablar de eso- Luis lo separó

-¡Eres un pendejo!- se me acercó Oscar y alcanzó a darme un golpe- ¿¡Pensabas dejarla!?, Puto sin vergüenza-

-¡Ey, Oscar!- Lenin lo abrazo- luego podremos matar a Hassan pero aquí no es el lugar ni el momento- Lenin me vio feo y luego salio con los demás de el hospital

Yo me senté en la sala de espera junto a Natanael.

-¿Ya estás feliz?- me preguntó con algo de lágrimas en los ojos- tu fuiste el que dijo que no quería ese niño

-Nata, estaba enojado- le dije, me sentía horrible- ese bebé era mi plebito, era mi niño- yo me tape la cara con las manos

-Si Hassan, pero no se justifica todo lo que le dijiste-

-no lo pensé, hiba ebrio- revolví mi cabello con mis manos llenas de sangre.

-aún no es pretexto- suspiro- pobre morra, ¿Cómo le vamos a decir esto?- sus ojos estaban llenos de lágrimas al igual que los míos