𝐎𝐩𝐨𝐫𝐭𝐮𝐧𝐢𝐝𝐚𝐝 // 𝐇.𝐋

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Narra Hassan~

-¿Qué vamos a hacer hoy?- le pregunte, estábamos recostados en el sillón de la sala

-no tengo ganas de nada- me dijo mientras se ponía boca abajo

-¿Qué te paso o que?-

-tengo colicos- me dijo mientras hundía la cara en un cojín

-ay, pobrecita la niña- le dije y la abrace

-extraño a el bebé. Gracias a él no pasaba por esto-

-si quieres ahorita te hago otro- ella río. Pero derrepente unas lágrimas se le salieron- ey morra, no llores-

-yo si quería a mi bebé. Yo ya te imaginaba cuidandolo en las noches- dijo mientras limpiaba sus lágrimas

-si morra, yo también lo quería- la abrace- no llores

-yo quería a mi hijo- lloro más, pero después se empecé a reír

-alv morra, tenías que invitar de esa que te metiste- la mire algo confundido

-¿Me estás diciendo loca?, Pinche pendejo- se aparto de mi

-okelaverga- le dije- no te dije nada, plebe

-¿Me estás diciendo esquizofrénica?-

-nooo, yo te amo-

-yo también- me dijo y me volvió a abrazar

-neta que estás bien pinche loca- dijo Natanael desde las escaleras. Yo reí

-¿Me pasas a Blair?- me preguntó y yo me levanté pasa dársela, ella la abrazo

-bien hermosa mi bebecita preciosa- dijo haciendo una voz aguda mientras la abrazaba y le daba besitos en su nariz.

Se recostó con su cabeza en mi pierna

Al poco tiempo ella se quedó dormida abrazándome, yo me levanté y la tape con una cobija.

-Pinche mandil alv- me dijo Nata, estaba sentado en la cocina mientras prendia un cigarro

-ey Nata. Yo no sé nada de la mamá de Malya, ¿Qué pedo o que?- le pregunté, Malya nunca me hablaba de su mamá- nunca me habla de ella

-pues la morra no habla por qué su mamá era bien culera- me dijo y me pasó la cajetilla de cigarros, yo tomé uno- a la plebe la corrieron de su casa cuando tenía 16

-¿Neta?- pregunté algo asombrado

-si wey, estuvo viviendo conmigo unos años- me dijo y le dió una calada al cigarro- su mamá tenía un novio, el pendejo ese abusaba de Malya cada que podía- exhaló el humo, yo imite su acción- la pobre salía de su casa llorando a las 3 de la mañana y Óscar y yo la ayudabamos. Una ves la lastimo de más al pendejo, era bien puto borracho y Malya no se sabía defender-

-¿Cuántos años tenía o que?- pregunté, sentía coraje por eso

-La primera ves que lo hizo Mal tenía como 6 años- yo abrí los ojos- Toño se encabronaba y llegaba bien enojado a mi casa. No podíamos hacer nada contra un pendejo de 30 años, el era más grande que nosotros en todos los sentidos- apagó su cigarro con el cenicero

-pobre de Mal, wey-

-nooo, y todavía su mamá la golpeaba, le decía que no servía para nada, que nunca iba a ser suficiente, que no debió de tenerla y sabe que tanta verga más le decía. Y cuando Malya le contesto la ruca se enojo y la saco de la casa-

-¿Y que con el otro pendejo?-

-pues luego nos lo chingamos, tiramos el cuerpo en una alcantarilla y cuando lo encontraron arrestaron a la mamá de Malya-