📍Brasilia, 2021
Aquí se sentía bien, tan bien que no me quería salir del círculo de felicidad que estaba. No había olvidado la sensación perfecta que provocaban sus labios, pero de si lo extrañaba, eso sí. La profundidad del beso seguía y seguía, si ánimos de frenarse, de parte ambos, eso lo podía afirmar con certeza. Yo me quería quedar ahí y el no mostraba otra cosa que no sea lo mismo que yo quería. Cada centímetro de su boca y la mía, se conocían perfectamente, suavidad, lentitud y una descarga inmensa de amor. Pero la falta de aire, freno todo obligándonos a separarnos por escasos minutos
-Te amo Olivia, te amo tanto- ese susurro sobre mis labios era lo que quería escuchar. Por Dios, este hombre me volvía loca
Pero antes que contestara a su declaración, volvió a interrumpirme, aferrándose a mis labios nuevamente, en un beso suave. Sus labios eran suaves y perfectos.
-No te das una idea lo mucho que extrañaba tus besos-dije yo embriagada de tanta intensidad
Su amplia sonrisa traviesa me ilumino el rostro por completo, dejándome atónita. No quería que dejara de besarme, y eso él lo sabía, sabía que él podía intuir mi deseo de ser besada hasta el cansancio por el
-Dibu, vos...-
Me había olvidado por completo que estábamos en la oficina de Daddy. Rápidamente me solté del agarre de Emiliano, quien parecía fastidiado por la interrupción. No había manera de decir o explicar algo, Daddy comprendía sin preguntar qué pasaba ahí, miraba sorprendido pero reacciono rápidamente levantando sus dos manos en señal de disculpas
-Olivia, no sabía que estabas aquí- hablo sorprendido, a lo que yo solo sonreí
-Estaba buscando unos... parches, que me dijiste que traías en tu maleta- hable con toda la vergüenza del mundo, mientras buscaba en el bolso que se encontraba en la camilla
-Sí, ¿Para quién los necesitas?- pregunto
-Eh, no... por las dudas- respondí nerviosa
-Bien, necesito si puedes te encargues de Otamendi y el Kun, porque me tienen fundido ya- ¿ahora? ¿Enserio Daddy?
-Dale- dije resignada
Sin motivos de alejarse de la puerta espero a que yo saliera, me di media vuelta y sonreí tímidamente a Emiliano quien todavía estaba ahí, guiño su ojo como mandándome una señal de que podía irme tranquila. Señor, este hombre.
...
-Cuiabá nos espera- menciono Pablito ocupando su lugar junto a Scaloni en el colectivo ya cargado de todo el plantel
Daddy y yo cargábamos las ultimas cosas para irnos directo a nuestros lugares y esperar para salir directo hacia el próximo destino. Nos acomodamos y al cabo de 20 minutos después el colectivo comenzó a dar marcha. Qué lindo viajecito nos esperaba
-¿Tienes hambre?- pregunto mi compañero del lado
-No, ya comí, gracias- conteste cansada
-Sí, parece que volviste a comer bien- me gire al escucharlo -¿o vas a negarlo?- lo mire sin entender de que hablaba a lo que el rio efusivamente –Buscabas los parches, según vos- reí tímidamente al entender su referencia
-Chistoso- dije en susurro, riendo a su lado
-¿Ya se arreglaron?- consulto
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Calamitoso Divorcio |Emiliano "Dibu" Martínez|
Fanfiction-Y ahora yo los declaro... Marido y mujer. Puede besar a la novia- Si, esa, la misma imagen de ese maravilloso día, es la que tengo ahora en un cuadro frente de mí mientras descansa la décima copa de vino sobre mi mano. El enorme ruido del silencio...
