Eddie subió al techo de su camioneta y estiró los brazos hacia abajo para agarrar las bebidas que Steve le tendía. Seguidamente el castaño también subió, sujetando una bolsa con frituras y demás chucherías. Los dos se quedaron sentados viendo hacia el frente y tomaron un tragol de las sodas casi al mismo tiempo.
Después de huir despavoridos de la preparatoria, fueron al supermercado por algo para beber y luego condujeron en sus autos hasta el lago Lovers, estacionándose bajo la sombra de algunos árboles.
—¿Te sientes mejor?
—Eres un exagerado. — bufó Eddie y bebió más soda — Estoy bien, Harrington. ¿Vamos a ir a jugar o no?
—Por eso pregunto si te sientes mejor. Pero de todos modos... aún es muy temprano. Me gustaría almorzar antes de hacer cualquier cosa.
Eddie volteó a verlo sin mucho disimulo y bebió un trago de su helada cocacola.
—¿Qué vamos a comer?Steve suspiró.
—No sé. Esperaba comer algo nuevo durante el viaje; pero igual, creo que las hamburguesas de Hawkins jamás pasarán de moda. — aquel comentario hizo sonreír a Eddie — ¿O tú qué quieres comer?—Hamburguesas están bien.
Ambos se dedicaron a ver el lago en silencio, hasta que Eddie volvió a hablar.
— ¿Alguna vez has venido a pescar?—No. Mi papá no es muy amante de la naturaleza, y mis amigos mucho menos. ¿Y tú?
—Sí, con mi tío. Él es muy bueno pescando, pero yo no tengo paciencia y tampoco me gusta estar callado. — Steve lo vio sonriendo, pero a la vez con el ceño fruncido por la confusión — Cuando pescas debes estar callado, ya que el ruido ahuyenta a los peces. — aclaró Eddie. Steve se echó a reír.
—Me parece que tu tío te dijo eso solo para no tener que escucharte hablar.
—¡Cállate! — dijo Eddie riendo y dándole un empujón que casi lo hace perder el equilibrio y caer del techo de la camioneta, pero ninguno de los dos dejó de reír.
Cuando dejaron de comer, Eddie se acostó boca arriba, viendo los rayos del sol que se filtraban por entre los árboles; pero cuando comenzaron a molestarle, se tapó los ojos con el brazo.
—¿Te estás durmiendo? — escuchó preguntar a Steve un rato después. Sonrió aún con la mitad de su cara oculta por el brazo.
—Hay mucho silencio y un buen clima.
—Supongo...
—Inténtalo. — le sugirió Eddie.
—No voy a dormir sobre el techo de un auto, junto a un tipo que conocí hace dos horas.
—No te voy a hacer nada.
—No es eso, solo es extraño.
Eddie suspiró y se levantó desganado.
—Bien. Hay que irnos. — murmuró al tiempo que se frotaba un ojo con los dedos.Steve sonrió un poco al ver que el chico tenía varias hojas enredadas en el cabello.
—¿Por qué usas tantos anillos? — preguntó mientras estiraba la mano para quitarle las hojitas. Eddie encogió los hombros — ¿Por qué llevas las uñas pintadas? — la misma respuesta silenciosa — ¿No sabes nada sobre ti mismo?—Solo porque sí y ya.
—Eres un tipo raro.
—Sí, me lo han dicho. — murmuró flexionando las rodillas y apoyando la cabeza en ellas.
—¿Has tenido novia alguna vez?
—¿Tengo cara de alguien que ha tenido novia? — preguntó Eddie con una sonrisa perezosa.
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¡Hey, tú! [Steddie]
RomanceSteve y Eddie se conocen por una tonta casualidad durante su primer año de preparatoria, y las diferencias que al principio parecían separarlos, serán las mismas que un día los harán darse cuenta de que son el uno para el otro.