Capítulo 23 Católicos VS Protestantes

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Todo va mal en el reino, que bueno que Ashley se ha ido. La religión se ha dividido y no fue por mi culpa. Soy Reina, no debo de equivocarme y claramente lo hice, y no sé qué es lo que paso.

Pero se han dividido de católicos y protestantes, algo que no podría permitir. Ahora los protestantes querrán mi corona y no solo eso, eliminaran mis herederos si es que algún llega a pasar, sin mencionar que matarán a las personas que me importan que son Ashley y Mónica.

Soy católica esa es mi religión y siempre lo será, pero los protestantes no quieren que su reina sea católica, en mi lugar quieren a la reina de Inglaterra. Isabel. Ella es protestante, pero los católicos se sentirían en peligro.

Esto es algo peligroso. Cualquier dedo que mueva, cualquier cosa que haga mal, todo se va a deriva. Todo se acaba. Inglaterra no solo tendrá a una protestante en el trono, sino que tendrán Inglaterra y Filliph, y yo no pienso dar mi reino en una bandeja de plata. Primero muerta, antes que dar mi reino.

Caminaba de un lado a otro, movía mi anillo de oro de mi dedo índice, desesperada.

-Romina, qué pasa. - entro en mi aposento. -Dime.

-Voy a perder el reino. Y no tengo ninguna idea.

-No entiendo.

-Mónica, ¿qué no entiendes? Es fácil, Isabel quiere Filliph, ve que es un reino pequeño y después de que tuvimos una guerra nada exitosa, quiere atacar, atacar mientras soy vulnerable.

-Ya no eres vulnerable, Romina. - y se me surgió una idea. Todos piensan que soy vulnerable, lo cual ya no es cierto. Necesito algo, a alguien.

-Me tengo que casar.

-¿Qué? - se acercó hacía a mí y tomó mis hombros.

-Por un momento reacciona como antes y piensa como yo he pensado. Me tendré que casar con un protestante, es un poco difícil buscar un rey protestante.

-Hay más soluciones, creo.

-¿Cuáles? Mando a la ejecución de los protestantes y más, y más protestantes van a atacar a los católicos. Y si mato a los católicos, va a ser lo mismo. No hay nada de solución.

-Habla con los protestantes.

-Yo. Una reina católica.

-Trata de convencerlos.

-No quiero otra guerra. Necesito aliarme a más países, Alemania, Francia, Escocia, ...

-Romina, no lo necesitarás. Sé que ellos entenderán. Los protestantes no son monstruos deformados, espera...

-Si espero, atacan a mi reino e Inglaterra atacará a Filliph. No puedo esperar.

-Has un comunicado, algo.

-Hare eso por la parte más moral y razonable, pero si es lo contrario, tendré que obligarme a casarme.

-Has lo que tu mente decida, pero ten en cuenta tu corazón, Romina. - solo asentí y me fui.

Si no hay otra forma de razonar de manera pacífica con los protestantes, me haré obligada a esposarme con un rey protestante, para que vean que no voy en contra de ellos.

La vida perfecta de RominaDonde viven las historias. Descúbrelo ahora