¡Yo Nunca Me Voy A Enamorar!

5. ¡Cállate!

P.O.V Trent

Al tocar el timbre, me fui con James a clases ya que él me tocaba de maestro, porque tocaba Biología.

Lo más incómodo de esa materia es que todas mis compañeras se le quedan viendo a mi hermano. Es raro ver chicas babeando por él.

Estás celoso de él

No es cierto.

Te encantaria ser como él, acéptalo Trent

No me encataria ser como él, sólo quisiera tener chicas babeando por mí. Más bien a una en específico.

Pues no ayudas en nada, ni siquiera puedes hablar con una chica, tonto. ¡Ni siquiera puedes decirle tu nombre!

- ¡Cállate y déjame en paz!

- ¿Ahora yo qué hice?-dijo James haciéndose el ofendido.- ¿Y así quieres conseguir chicas?-rió.

- Cállate.-rodé los ojos.

- Lo primero que debes dejar de hacer es hablar solo.- dijo en tono burlón.

Cierto.

-Y entonces ¿Cómo dices que se llama?.- me preguntó mi hermano.

- Tiana.- dije su nombre y me empecé a sentir sonrojado.

-Aaah, Tiana Vanguardia, sí, ya se quién es. Esa chica es para ti, además es bonita.

Eso no es cierto, no es bonita, es hermosa.

Y al decir esas palabras en mi mente vi pasar a Tiana y sentí mi corazón por la garganta.

- Bueno hermanito, entra a clase.-dijo y luego hizo una mueca.- me toca darte clases ahorita, así que corre o te pongo falta.

- Si, ya vo...-dije o más bien lo que alcance a decir porque me interrumpieron.

- Buenos días, Señor Leger.-dijo una voz conocida.

Martha Connelly, la perra tan injustamente sexy de la escuela.

- Buenos días, señorita Co...-dijo el dudando, o como yo conocía lo hacia a propósito pero la muy tonta no se dio cuenta.

- Connelly.-dijo Martha con un guiño.

- Bueno Señorita Connelly es hora de entrar a clase.-sijo.

- Lo que diga.-dijo y entro al salón.

- Espero que Tiana no sea tan perra como ella.-me susurro en el oído y entro al salón.

Para nada James.

Y tú que sabes.

¿A ti quién te hablo?

Soy tú conciencia, bobo.

Entré al salón y me senté. Llegó Tiana, me saludó con la mano, y se sentó a unas filas atrás.

- Buenos días clase, como sabrán este bimestre hablaremos sobre el cuerpo humano, así que explicare lo que un cuerpo humano o mas bien nuestro cuerpo tiene. Como todos sabemos hay dos tipos de sexos, masculino y femenino...

Y blah blah blah, ya no le presté atención ya que lo interrumpían diciendo que si él era un ejemplo o si nos enseñaría su cuerpo.

Pobre James, parece incómodo.

Me aburrí y me puse a leer. Al terminar la clase todos salieron. Agarré mis cosas y me fui a mi otra clase. Hasta que choqué con alguien.

Hay no ¿no puede empeorar más mi día?

- Perdón.-susurré.

- Porque no te fijas.- me contestó Sebastián empujándome.

- Y...yo...

- ¿Qué pasa tienes miedo?-soltó una carcajada.

-Y...Yo n...no qui...quiero problemas.-dije nervioso y un poco asustado, no quería problemas ahora.

- ¿No quieres problemas, tonto?-dijo en un tono burlón y empujándome otra vez sólo que en los casilleros.

- ¿Hay algún problema?-dijo una voz familiar.

¡Gracias James! Me salvaste.

- Nin...ninguno, Profesor Leger.-dijo un poco nervioso Sebastián. ¡Cobarde!

- Bueno entonces suelte a su compañero y acompañeme con el director.-dijo molesto, nadie se metía con su hermanito.

James se llevo a Sebastián, él tratándose de cuidarse inútilmente. Solté un suspiro cansado.

Te salvaste por pura suerte.

Lo sé, bendito James.

Sabes que tendrás que agradecerle luego ¿verdad?

No, con él sólo me quedo con mi orgullo.

Mentiroso

¡Cállate!

(...)

Al terminar las clases que faltaban, fui por mis cosas al casillero y esperé a James para que me llevara a casa ya que no me quería ir caminando.

Estaba esperando afuera de la sala de maestros hasta que James llegó. Y se me quedó mirando.

- ¿No me vas a agradecer?-levantó una ceja.

- No.

-Bueno si no me vas a agradecer, al menos me debes una explicación de lo que sucedió allí en los casilleros.- dijo cruzando los brazos.

- Nada.-dije evitando el tema.

- Trent, te conozco perfectamente y sé que te salve de esa ¿Qué sucedio ahí?

- Ya te dije que nada.- empecé a caminar.

- Trent.-No le hice caso.

Llegué hasta el auto. Y James seguía llamándome pero seguía sin hacerle caso.

- ¡Trent!-dijo ya molesto.

- ¿Qué?-contesté enfadado.

El entró al auto como piloto y yo entré como copiloto. Dejé mi mochila en el aciento de atrás y cerré mi puerta.

-Trent.-dijo otra vez.

- James ya te dije no paso nada, ya olvídalo.- no me gustaba hablar de como Sebastián molestaba a las personas.

Es tan odioso.

-¿Por qué no me dijiste que alguien te molestaba en la escuela?-dijo muy molesto.

- Nadie me molesta.-dije sin prestarle atención.

-¡¿Entonces qué fue eso de los casilleros?!-gritó. Dio un golpe al volante y soltó un suspiro cansado.

- ¡Nada James!-grité ya molesto.

- ¡Soy tu hermano mayor tendrías que habérmelo dicho! ¡Podría haberle partido la cara!

-Eres su maestro, James, no puedes. Así que ya basta James.

- Yo solo decía.-dijo alzando las manos haciéndose el inocente. Encendió en auto, y me miró pícaro.-y bueno cuéntame de ella.

Hoy sera una laaaaarga tarde para ti, Trent

¡Cállate!

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Holaaaaaa. Esperamos que les haya gustado este capítulo. Estuvo corto pero no hemos tenido tiempo de hacer mas largos, trataremos de hacerlo. Queriamos preguntarles

¿Les esta gustando?

Esperamos que si. También queriamos decirles que no en todos los capítulos habria fotos en la multimedia solo a veces. Y comenten su opinion. Y perdon por las faltas de ortografía. Estaremos editando en cada cierto tiempo. ;-)

Atte:

     Ilse y Moni.
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