𑁍 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐓𝐫𝐞𝐜𝐞 𑁍

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La tormenta que había abrazado a la ciudad, parecía no querer abandonar el lugar, es más, parecía que ansiaba sumergir los edificios y las casas, bajo el manto de agua. Los truenos y relámpagos  iluminan la casa de la familia Black. En el tercer dormitorio que había en el hogar, dos personas estaban acostados en la cama, abrigados con una suave y peluda frazada de color gris con estrellas bordadas, estrellas que sorprendentemente brillaban en la oscuridad.

—Thomas, esto sonara loco, pero tengo calor— dice Regulus casi como si fuera un susurro

—¿En serio? Vaya pensé que solo era yo— se burló Tom, generando así una sonrisa en el rostro de Regulus 

—¿En serio también tienes calor?— cuestiono burlón Regulus, mientras se sentaba en la cama y estiraba su mano hacía donde estaba el pequeño control del aire acondicionado —Bueno, vamos a congelarnos a gusto

Tom retiene una risa y mientras Regulus se vuelve acomodar en la cama, su mente se pierde en sus pensamientos.

Anteriormente, reír no era nada fácil para él, pues siempre estaba guardando sus sentimientos, ya que la sociedad Inglesa mágica, podía ocupar estos mismos para herir a las personas, por eso; él estaba siempre con una máscara, pero ¿Por qué ya no podía? ¿Era acaso el hecho de tener una familia que lo había cambiado? ¿Era por Peter y Marlenne? ¿Luna y Neville? ¿Spencer? o acaso era por Regulus Black. Lo observó de reojo, ya se había acomodado en la cama, y tapaba su cuerpo con la frazada peluda, que parecía comenzar hacer su función. 

—Reg— susurra su nombre, su cálido aliente pude comenzar a sentirse gracias al frío que parece haber envuelto la habitación rápidamente.— Tienes los pies fríos 

—Y tu las piernas calientes, así que cállate— expresa Regulus 

Tom ríe. Los pequeños pies de Regulus se apoyan en sus piernas, parece que la idea del aire acondicionado en ese día de frío, era una mala idea ahora, pero con la presión que hay entre los dos cuerpos. Solo cerraba los ojos cuando sintió que Regulus se pegaba a él.

—Regulus, ¿Qué estas tramando?— cuestionó Tom, captando la atención del más pequeño; quien simplemente saco una suave sonrisa de sus labios.— Pequeño granuja 

—¿Yo?— cuestiona ella con voz baja y risueña.—No he hecho nada... Aún

—Ese «aún»  no me convence— niega Tom, pasando su brazo izquierdo por la cintura del más pequeño 

—¡Juro que no es nada malo!— exclama, apoyándose contra su costado izquierdo y alzando un poco su cuerpo —Confía en mi

Tom tararea. No sabe exactamente si estar o no estar de acuerdo con ello; pero lo único que pudo hacer fue cambiar de posiciones logrando que Regulus quedara encima de él.

—¡Agh!— exclama Regulus sorprendido, apoyando sus manos a cada lado de la cabeza de Tom, y alzando su cabeza para que esta no chocara con el de ojos azules.— Thomas, ¿Qué estas haciendo?

—Asegurándome que no hagas nada malo— expresa tranquilo Thomas 

Los dos se miran, y el frío del aire acondicionado ya no importa. Las piernas de Regulus bajan del cuerpo de Thomas y las pone a cada lado, mientras que sus manos viajan de cada lado de la cabeza; hacía el pecho del otro y levantarse tranquilamente, logrando que la frazada caiga hasta su cintura y las manos de Thomas bajan hacía su cadera.  

—He de admitir que la vista desde aquí arriba es muy buena— se burla Regulus, mientras pasa sus manos por el pecho de Thomas

—Sigue Black, que me vas a conocer muy bien—señala Tom, para después sonreír —Ahora que lo pienso, la vista por acá abajo estaba de maravilla

𝐋𝐚 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐚 𝐕𝐢𝐝𝐚 𝐃𝐞 𝐓𝐨𝐦 𝐑𝐢𝐝𝐝𝐥𝐞 «𝐑.𝐁𝐥𝐚𝐜𝐤»Donde viven las historias. Descúbrelo ahora