𝐋𝐚 𝐍𝐮𝐞𝐯𝐚 𝐕𝐢𝐝𝐚 𝐃𝐞 𝐓𝐨𝐦 𝐑𝐢𝐝𝐝𝐥𝐞 «𝐑.𝐁𝐥𝐚𝐜𝐤»

𑁍 𝐂𝐚𝐩𝐢𝐭𝐮𝐥𝐨 𝐕𝐞𝐢𝐧𝐭𝐢𝐬𝐢𝐞𝐭𝐞 𑁍

Tom observaba el techo de su habitación. Está frustrado. Demasiado frustrado, pues saber que estaba suspendido una semana de la universidad, le era una completa estúpidez.

Sus ojos azules se posan en las hermosa lámpara que había en su dormitorio, y aunque estaba muy frustrado y molesto, tampoco había algo que pudiera hacer.

—Cría, ¿Qué es lo que esta pasando?— dice con calma Cuervo, mientras se coloca a su lado, justamente en las finas sábanas que hay.—Te notó tenso, ¿Qué ha pasado?

—Lo mismo de siempre Cuervo, Dumbledore sigue dándole rienda suelta a los bravucones y los protege como si fueran lo más importante — se lamenta Tom 

Cuervo sisea molesta, detesta la idea de que su cría este mal por culpa de ese viejo.

—Pequeña cría, por favor, quiero que estés tranquilo— pide la enorme serpiente mientras mueve la lengua en una señal de respuesta a sus pensamientos.— No me gusta verte triste, pero mira el lado positivo, tu no conoces esta enorme ciudad a pesar de estar tanto tiempo aquí, podría servir para ver los alrededores, ¿Qué opinas?

—Sería una muy bien idea— sonrió alegre Tom, hablando ya normal 

Colocándose sus tenis, y tomando a Cuervo con cuidado, Tom bajo por las escaleras hasta que llego a la cocina, donde su madre estaba... ¿Bailando? 

—¿Mamá?— interroga preocupado, al ver a su madre hacer movimientos extraños  —¿Qué es lo que estas haciendo?

—Oh Tom— sonríe ella, mientras revuelve algo en el sartén —Que bueno que estas despierto, ya casi termino el desayuno, iré a revisar la construcción de la nueva plaza comercial; así que come algo 

—Oh bueno, yo iba a salir con Cuervo a dar un paseo por... el centro comercial— había dudado, claro que si, pero tampoco es que le dijera a su madre que quería recorrer la ciudad como si de un nuevo habitante se tratara

—¿Con cuervo?— interrogo, mirando a la enorme serpiente —No creo que el centro comercial te deje, pero si quieres pasear con ella, tengo que darte los papeles que tu padre logo conseguirte con ayuda del señor Black 

—¿Qué papeles?— interrogo curioso Tom 

—Cariño, Cuervo es una pitón reticulada, por lo que necesitamos papeles especiales para tenerla en nuestro poder y que protección animal no te la quite — señala con seguridad Belladona, mientras le daba una ultima probada al desayuno y asiente satisfecha por su logro. —Coman algo, mientras voy a ir por tus papeles 

Tom se sirve en un plato los huevos revueltos que su madre le había preparado, junto a los tres waffles gorditos que le había preparado, y un poco de tocino que había en el sartén. 

—Iré por mis ratones— siseo Cuervo, bajando de su hombro

Tom le observa divertido como se va y él apresura a comer. Mientras terminaba de degustar el crujiente tocino, escucha por fin el suave sonido de los tacones de su madre y se mueve un poco para ver hacía las escaleras donde la ve bajar, con una perfecta falda pegada de color negra, una camisa rojo vino y unas perfectas zapatillas del mismo color que la falda. Su largo cabello iba suelto, en una de sus manos sostenía unos papeles y la correa de una bolsa. 

—Ten querido, todo esta en orden— asegura, dejando los papeles en la mesa —Si alguien de la policía te para, solo enseña este documento— señalo el primer documento—Y con eso sabrán que tenemos permiso de tener a Cuervo con nosotros 

Tom asiente y recibe un beso por parte de su madre mientras se va. Terminando por fin la poca comida que queda en su plato, justo a tiempo para que Cuervo volviera, satisfecha de haber cazado a todos los ratones que pudo encontrar.