TRUE LOVE ? [ Bill Kaulitz ]

. CAP 3 - Kaulitz Birthday pt.2

– No es nada pequeña, solo, ya sabes, a veces estoy un poco estresado por cosas de la banda, pero nada especial.
– Claro...la banda...¡¿No será que te gusta una chica Bill Kaulitz?!
El chico se ahogó con su propia saliva al escuchar aquellas palabras ¿Era tan obvio? ¿Sabe que es de ella? ¿Pero qué mierda? que dices Bill, no te puede gustar tu mejor amiga.

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El chico soltó una risa nerviosa mientras que sentía el calor subir por sus mejillas, lastima que su piel palida no dejaba esconder aquél sutil sonrojo que se le hizo presente.
– No me gusta nadie, yo solo estoy interesado en la música, no quiero distraerme.
¡Crack! el corazón de la chica había sentido cierta desilusión, no sabía porqué pero de cierta manera esperaba el hecho de que Bill tuviera alguno que otro sentimiento mutuo con ella. ¿En qué estaba pensando? ¡Ew! es como mi hermano, no puede ser.

– Que lastima que no te guste nadie, pero bueno! mi muñeca ya está mejor, puedes ayudarme a colgar esto? eres mas alto así que seguro alcanzas bien. Soltó una pequeña risa que se escuchó al unísono con la del contrario, estaban en su mundo mientras que no se habían percatado de la presencia de Tom y Gustav en la misma sala que ellos.

– Woah, tierra llamando a tortolitos? ¡Que asco! son tan cursis y melosos, por fin van a confirmar?
La voz del gemelo sobresaltó a la chica que se volteó rapidamente con las mejillas color carmesí.
– ¡De qué mierda hablas Tom! cómo yo estaría con Bill? es cómo mi hermano, es mi mejor amigo. de todas las cosas estupidas que dices esta definitivamente gana. Dijo con cierta mentira. no le desagradaría la idea de estar con Bill, pero si ella no decía nada jamás se enterarian y eso era lo que quería conseguir.

– ¡Lo mismo digo! no, no y no, no puedo estar con Astrid, Simone y su madre nos matarían! además de que es muy pequeña para mi, y es mi mejor amiga.
Astrid le mandó una mirada asesina elevando su cabeza hacía arriba, enserio el pelinegro era alto...

– ¡Tampoco te pases! solo tengo un año menos que ustedes.
Todos rieron por la tierna reacción de la chica, intentaba parecer enojada pero mas que eso parecia un oso de peluche rabioso, no le salía bien.
– Uhh, peleita de parejas, vamonos Tom. Habló Gustav y volvieron a la cocina con Tom haciendo chistes y burlas aun audibles para el pelinegro y la castaña.

– Me dan ganas de matar a tu hermano, a veces es tan molesto.
Rodaba los ojos y hacia muecas de desagrado dedicadas a Tom, estaba bromeando claro, pero de todas maneras le parecían molestas sus bromas, que le importaba a el siendo un mujeriego lo que hiciera su gemelo?

Luego de un rato el pelinegro y la castaña terminaron de alistar todo para la fiesta. eran las 9 de la noche y los invitados no tardarían en llegar. la chica se estaba alistando en el baño de Bill, había llevado todo lo necesario para poder hacerlo.

(

Puedes imaginar el outfit que más te guste, solo puse la imágen por insipiracion.)

Al poco rato la castaña salió del baño con aquél conjunto de ropa, hacia resaltar sus curvas y los colores hacian destacar su piel, ni muy morocha ni muy pálida, era simplemente perfecta, aunque de todas maneras quería la opinión de su amigo, que la estuvo esperando todo el tiempo sentado en su cama.

– Al fin! cómo te demoras tanto en escoger ropa, chica. Las palabras cesaron en cuanto Bill se dió cuenta de la apariencia de la chica, no pudo evitar soltar un suspiro lo suficientemente audible para la que la chica lo escuchara, la veía de pies a cabeza, no podía creer que la chica que tenía en frente era la chica de 8 años que había prácticamente rescatado.

– Y bien?, como me veo? crees que esta falda es muy corta? tengo mas opciones y no sabía que escoger.
Las palabras no dejaban de salir a causa de los nervios, ahora entendía porqué Bill siempre preguntaba tantas cosas y parloteaba tanto, eran los 'Nervios'

– Te queda precioso, enserio. Dijo el pelinegro haciendo que la castaña se sonrojara y sonriera.
– Bueno ahora debo maquillarme, puedes ir abajo con los chicos para que no te aburras, me llevará un tiempo.
– No te preocupes por eso, te esperaré lo que demores, aunque con una condicion. La castaña ladeó la cabeza extrañada. – ¿Condición?
– Sí, que me maquilles los ojos luego.
– Oh claro, si, eso.
La castaña no había podido evitar pensar en cosas que no eran, plena crisis de adolescencia, hormonas.. pensaba en cosas fuera de lugar a veces. se avergonzó un poco pero rápidamente fue al baño a comenzar su maquillaje, no era muy cargado ya que su piel de por sí era perfecta, pero si algunos retoques.

Luego de maquillarse se acercó al chico que la esperaba con una sonrisa, llevaba sus sombras negras con ella ya que se esperaba que Bill pidiera un maquillaje en sus ojos al igual que ella, claro, sin tantos brillos.

– Ven aquí.
Atrajo a la chica agarrandola del brazo y la hizo pararse justo en medio de sus piernas abiertas, estaba sentado en una esquina de su cama mirando hacía arriba esperando el maquillaje que le haría la chica, la cercanía la volvía loca, esos labios tan lindos, solo quería besarlos, pero no lo hizo. porqué no quería arruinar el momento.

10 minutos en los que su al rededor desapareció, al terminar el maquillaje Bill abrió sus ojos y se encontró a su castaña mirándolo de cerca, sus impulsos estaban apunto de ganarle, pero no era el momento, ¿O si?

– Muchas gracias por el maquillaje, estoy seguro de que te quedo muy hermoso...
Tomó la cintura de la chica y la apegó hacia a el rodeandola en un abrazo, de aquellos que la chica adoraba, pero este era diferente, era como si Bill intentara que sus emociones y sentimientos se transmitieran a través de su piel, sus manos frías en la cintura descubierta de la chica le daban pequeños escalofríos y el hecho de tenerlo tan cerca también.

– Bill, creo que ya llegaron las personas, deberíamos bajar.
– Mhm, si, tienes razón.
Soltaron el abrazo suavemente, en el fondo no querían separarse pero no querían levantar mas sospechas entre los molestos de Gustav y Tom, asi que bajaron rapidamente y comenzaron a saludar a los invitados que llegaban.