16

768 85 17
                                    

Al despertar, los rayos de el sol le dificultaron la vista al principio, pero cuando levanto su mano para cubrirse, noto el rostro de Minho frente a él, seguía dormido.

Han hizo una mueca y comenzó a picar con su dedo la mejilla de Minho, queriendo despertarlo.

Este hizo gestos aún dormido y se dio la vuelta, dándole la espalda. El pelinegro suspiró y se levantó sobre la cama, comenzando a saltar de forma brusca, provocando que Minho se despertara de golpe y mirara confundido a todos lados, hasta que vio a Han.

-¿Por qué?- preguntó Minho cansado.

-Ya es de día y no es tiempo de dormir- decía sin dejar de saltar, sonriendo- Es buen ejercicio, además.

-Por supuesto lo haces por eso y no para ponerme de malas- respondió Minho tomando una almohada y cubriendo su rostro con ella.

-¡Minho!- gritaba Han- ¡Vamos!.

Han se dejó caer en la cama y tomó las manos de Minho, jalándolo hacia él para que se levantara, pero soltó un pequeño grito cuando sintió que jalaron su mano, haciendo que quedara encima del castaño.

-¿Podrías detenerte?- pidió Minho.

-Tal vez- Han se sentó sobre las piernas de Minho- Vamos, te ayudo a arreglar tu cabello.

Después de decir eso, las manos de Han se colocaron sobre la cabeza de Minho, revolviendo su cabello y riendo al notar que esto lo irritaba.

-¡Ya basta!- decía Minho y se dio vuelta sobre la cama, quedando encima de Han, tomó sus manos dejándolo inmóvil- Parece que no puedes estar tranquilo hasta que alguien te controle.

-No, Minho, un mañanero no, no estoy de humor- se quejó Han haciendo un puchero.

-Idiota- soltó quitándose de encima y tomando su celular- Ahora cállate, tengo que hacer una llamada.

-Mhm...- Han se acomodó de costado sobre la cama, apoyando su mano sobre su mejilla.

Cuando Minho comenzó a hablar por celular, Han se levantó, caminando al rededor suyo, dando toques en sus costillas, provocando que este se removiera y tuviera pequeños espasmos.

Pero cuando pasó frente a él, Minho lo abrazó de frente y con fuerza, atrapándolo y dejándolo sin escape.

-Sí, claro que puedo- asintió Minho- Te veo en...¡auch!.

-¿Estás bien?.

-S-Sí, te veo en un rato más- fue todo lo que dijo y termino la llamada, soltando a Han con brusquedad- ¿Por qué hiciste eso?.

La mano del castaño ahora se encontraba cerca de suclavícula, haciendo una mueca de dolor mientras tocaba el lugar donde Han lo había mordido.

-Me sentí en peligro y me defendí- Han alzó los hombros, soltando una risa al final.

Minho rodó los ojos y se dio la vuelta, dirigiéndose al cuarto de baño, esta vez al que tenía una gran bañera.

-Así que...- Han lo siguió- ¿A dónde iremos?.

-Veré a quien se encarga de las ventas de los autos en esta ciudad- respondió esta vez más relajado.

-¿Crees que le moleste que esté ahí?, digo, no es como si me importara pero...

-No, a ella no le molestara- Minho alzó los hombros, entrando a el baño, Han entró con él.

-Whoa, una chica, ¿es bonita?- preguntó alzando una ceja.

-Eso no es relevante y ahora vete de aquí- Minho lo miró mal.

-Dijiste que no te molestaba que mirara- dijo Han indignado- Minho, mentir es malo. 

Vulgar {minsung}Donde viven las historias. Descúbrelo ahora