Capítulo 7: El Examen Chūnnin.

490 40 1
                                    

Naruto pertenece a Masashi Kishimoto

Uzumaki Naruto, Haruno Sakura y Uchiha Sasuke, ingresaron en el salón 301, en donde se daría el Examen Chūnnin.

—Increíble... —murmuró Naruto.

— ¿Qué...? ¿Qué significa esto? —preguntó Sakura, sintiéndose intimidada, por la enorme cantidad de participantes en el Examen. —Esto está lleno de gente, ¿tantos vienen a hacer el Examen? También parecen ser muy fuertes...

— ¡Cuánto has tardado, Sasuke-Kun! —dijo Ino, subiéndosele a la espalda al Uchiha. Naruto y Sakura se miraron, dejaron escapar un suspiro y se fueron cada uno por su lado a sus asientos. —No sabes la tristeza que sentí, hace seis meses, cuando no te presentaste...

Se escuchó una invocación y aparecieron once sujetos. En el centro, un hombre que llevaba una pañoleta, sobre la cual tenía la placa de Konoha y tenía cicatrices en todo el rostro. Vestía con una gabardina y un uniforme gris. Los otros diez, llevaban el mismo uniforme gris, pero sin la gabardina. —Soy Morino Ibiki, el primer examinador. Todo el mundo: a sus asientos. —se giró hacía el tablero, agarró una tiza y comenzó a escribir —Primera norma: Comienzan este examen, con diez puntos perfectos y por cada pregunta no contestada, entonces perderán un punto. Segunda norma: Se sumarán los puntos de los tres miembros, buscando un absoluto 30 y determinar si pasan o no lo logran. O lo que es lo mismo: la máxima puntuación es aquel 30 del cual les he hablado, se busca saber si pueden trabajar como una unidad. Tercera norma: Cualquier comportamiento extraño, provocará la expulsión del equipo entero. Los diez centinelas, han sido elegidos de entre los mejores Jōnnin y ANBU de Konoha, para evitar cualquier clase de trampa. Los intentos chapuceros de hacer trampa, serán su tumba. ¡Si aspiran a ser Chūnnin, entonces deberán de actuar como tales! La hora para completar el examen, comienza... ¡AHORA!

Sakura comenzó su examen, sintiéndose presionada por si Naruto no lo lograba. —Pregunta 1: Lee y traduce, el siguiente código. Esto no es difícil, para alguien como yo, pero... para Naruto... maldición. —comenzó a intentar traducirlo y lo mismo con Sasuke. —Pregunta 2...

Sasuke leyó la segunda pregunta. —La línea de la parábola en el plano llamada B, es el trayecto de una Shuriken, lanzada por el enemigo (A), subido en un árbol de 7 metros de altura... basándote en las características básicas de la elipse dibujada, indica el alcance máximo de la Shuriken con respecto a ellos... —Sakura abrió los ojos, incrédula ante la segunda pregunta. — ¡Una hipótesis con variables indeterminadas y requiere determinar leyes físicas de energía! —Sasuke arrugó un poco el papel, cuando apretó la mano. —No entiendo ni una maldita palabra de esto. ¡No se miden nuestros conocimientos, sino nuestras posibilidades para copiar, sin ser descubiertos! —miró a Naruto. Ambos estaban nerviosos y luego un haz de luz. — ¿He? —Siguió el haz de luz, hasta el techo. —Espejos... ¿Cuándo? Alguien estará copiando. Tenemos que hacerle llegar a Naruto, la información de alguna forma.

Pero incluso en medio de su momento de terror, la voz del Kitsune calmó al rubio. —No te desesperes, Naruto. Lo único que tienes que hacer, es usar tus dos Jutsus más conocidos.

¿Mis dos Jutsus más conocidos?

Crea Kage Bunshin y que sean como moscas, déjalos revolotear por allí, leer las respuestas y al disiparse, adquirirás sus conocimientos. —Le recomendó Kyūbi.

Gracias por eso —dijo Naruto, ahora sonriendo, mientras ocultaba sus manos, lo mejor que podía y creaba treinta clones, ahora bajo un Henge de moscas, mandándolos hacía otros examinados.

Sasuke con el Sharingan.

Kiba con Akamaru ladrándole las respuestas.

Hinata y Neji con el Byakugan.

Tenten, una chica que vestía con una camiseta china sin mangas de color rosado, un pantalón corto de color azul y cabello castaño con bollos; estaba manipulando los hilos de los espejos en el techo. —Si puedes verlo, Rock, entonces átate la bandana en la frente... —un chico de cabello negro con forma de tazón y un traje de Spandex verde, así lo hizo. — ¡bien!

Un Kunai pasó junto a Naruto y se clavó en el papel del chico, detrás de él. — ¿Qué significa esto?

—Has cometido cinco errores, estás fuera —dijo uno de los centinelas —45 y 66, vayan con él.

Yamanaka Ino, una chica rubia de ojos azules y que solía vestir, con una camiseta violeta y una falda del mismo color. Utilizó un Jutsu de su clan, sobe Sakura. —Shintenshi no Jutsu (Jutsu Cambio de Cuerpo y Mente) —cayó dormida y poseyó el cuerpo de Sakura. —Tengo que memorizar las respuestas y luego pasárselas a Chōji y Shikamaru.

—23, estás suspendido—dijo un centinela —43 y 27: vayan con él.

— ¡Disculpen! —Dijo Kankurō.

— ¿Qué quieres? —Preguntó un examinador.

—Necesito ir al baño.

El examinador se levantó y le colocó unas esposas, con una cuerda. —Tengo que acompañarte, entonces.

Ambos salieron y entrar al baño. —Idiotas, ni siquiera se han dado cuenta de que había un examinador extra. De acuerdo Karasu: dame las respuestas, desde la 1 y sigue hacía abajo. —Le ordenó a su marioneta.

—Es momento de la décima pregunta —dijo Ibiki.

Date prisa, Kankurō —pensó Temari nerviosa —necesito que me des las respuestas.

—Pueden decidir si contestar o no. Si deciden no contestar, entonces los miembros del equipo se marchan y podrán intentarlo en año que viene. —esto les pareció macabro, pero Ibiki siguió hablando —Si contestan erróneamente y ya que yo estoy a cargo este año, entonces se quedarán como Gennin, por siempre.

— ¡ESO ES UNA ESTUPIDEZ! —Dijo Kiba— ¡ESTO ESTÁ LLENO DE GENTE QUE HA SIDO GENNIN POR AÑOS!, ¡¿CÓMO QUE NO SE NOS PERMITIRÁ VOLVERLO A INTENTAR?!

—Este año estoy a cargo de la primera parte, mocosos —gruñó Ibiki —elijan. —seis equipos se fueron —Entonces, ¿ustedes se quedarán?

— ¡CLARO QUE NOS QUEDAREMOS! —gritó Naruto, colocándose de pie. — ¡NO DARÉ UN SOLO PASO ATRÁS HASTA SER RECONOCIDO POR ESTA ALDEA, COMO ALGO MÁS QUE EL MOCOSO KITSUNE!

Ha hecho desaparecer el miedo de los demás, en un instante —pensó Ibiki, divertido. —Todos deciden seguir al líder. ¡USTEDES HAN DECIDIDO SEGUIR AL LÍDER, USTEDES SUPERAN LA PRIMERA PRUEBA! —Alguien se puso de pie. —No. Existía una décima pregunta, era algo para medir su decisión, ante la presión. El objetivo de las otras nueve preguntas, era saber si podían adquirir información. Era un examen destinado a realizar trampa.

—Y los que expulsamos, podrían haber metido la trampa, en una misión de recolección de información o en una de infiltración —dijo uno de los vigilantes.

—Un examen de copia, un examen de recolección de información —dijo Ibiki.

La ventana se quebró y por ella ingresó una mujer de cabello violeta, ojos castaño claro, vestida con un largo abrigo beige con costuras moradas y bolsillos a los costados, manteniendo el abrigo abierto. Una camiseta de red. Una minifalda naranja oscuro en conjunto con un cinturón azul oscuro. Llevaba un par de protectores de piernas grisáceos, las típicas sandalias Shinobi y su protector de frente, además de un pequeño colgante similar a un colmillo de serpiente en un grueso cordón. —Soy Mitarashi Anko, la segunda examinadora. Ahora, acompáñenme. Es momento de la prueba de supervivencia.


Oficina del Hokage.

Al escuchar que alguien llamaba a la puerta, Hiruzen suspiró. — ¡Adelante! —la puerta se abrió, enseñando al examinador de la primera prueba, quien llevaba entre sus manos, un folio de hojas —Bienvenido, Ibiki-Kun, ¿todos estarán ahora, en el Examen de Supervivencia?

—Así es —afirmó el hombre, mirando entre los papeles y extendiéndole el examen de Naruto. —Permítame enseñarle, a alguien con el Kage Bunshin y un evidente buen uso del Henge. Este chico, Uzumaki Naruto, es como pocos que he visto.

La Oportunidad del Amor (NaruSaku)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora