Capítulo 67

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— Descansa todo lo que puedas durante una semana, hasta que los moretones mejoren — el médico cerró el informe — No uses los ojos y no te golpees la cabeza durante este período. Tu inmunidad es muy fuerte, no habrá problemas.

Off agradeció al médico, tomó la mano de Gun y lo llevó fuera de la sala.

La tarde siguiente, el portaaviones finalmente atracó, y ante los ojos de todos se encontraba un enorme grupo de islas artificiales en el vasto Mar del Golfo de Tailandia.

La isla principal cubría un área de 8.000 kilómetros cuadrados, originalmente el resultado de un proyecto de recuperación de tierras.

Ahora el Golfo no solo era el centro del comando estratégico nacional, sino que también era el refugio más grande durante este apocalipsis.

Siguiendo el concepto de diseño de la base subterránea en la Zona Militar B, la isla principal se dividió en cuatro áreas: gestión de comunicaciones, producción de energía, defensa y armamento y, finalmente, residencial.

Los barcos de guerra viajaban entre el continente y las islas todos los días, trayendo sobrevivientes.

La Unidad 118 se disolvió, pero el teniente general Noppol se hizo cargo de acompañar a las fuerzas especiales, cuidando especialmente a Off y los demás, colocándolos en un edificio de dormitorios dobles en el área militar de la isla principal.

Cálidas brisas barrían el océano, trayendo un agradable aroma de principios de primavera, y las exuberantes copas de los árboles verdes al lado del edificio se balancearon ligeramente, susurrando bajo la luz del sol.

Off se paró en el pasillo del edificio, mirando la calle limpia y la franja verde.

Los vehículos militares, de color verde oscuro, iban y venían, y a lo lejos llegaba el sonido de la marea. El viento agitaba su cabello corto, todo era tan pacífico y rutinario.

Era como si el éxodo sangriento durante medio año no hubiera ocurrido y la batalla cercana a la muerte de hace unos días se hubiera convertido en un evento muy lejano.

El teniente general Noppol hizo rápidamente lo que su superior había ordenado, por lo tanto, los documentos de promoción para Off y los otros se emitieron en solo un día.

Off fue ascendido en dos rangos, Tay, Pim, Mond y First fueron promovidos en uno, y los diecisiete camaradas del Sexto Escuadrón que murieron en la batalla fueron promovidos en dos rangos como un signo de compasión.

El teniente general solicitó personalmente que las cenizas de Mike fueran enterradas en el mausoleo temporal construido por los militares.

De hecho, el cementerio estaba muy bien cuidado y había pocas cenizas, después de todo, no quedaban restos mortales de la  mayoría de los soldados caídos y lo que se podía hacer en ese momento era crear monumentos de gloria con los nombres de los mártires.

Sin embargo, Off se negó cortésmente sin siquiera pensarlo.

— Le prometí a Mike que iría al noreste a buscar a su familia y luego les daría las cenizas.

El teniente general no insistió:

— Aunque no está dentro de las normas, es su decisión.

Un ojo arrugado de este viejo teniente general tenía un moretón obvio en la esquina, y Off no pudo evitar mirar una y otra vez.

Noppol levantó la mano, se tocó y preguntó:

— ¿Es obvio?

— ¿Qué pasó?

118Donde viven las historias. Descúbrelo ahora