Entre las Sombras

Cap53

No sabía que hacer, si escucharlo o darse media vuelta e ignorarlo. Que era lo que deseaba hacer. Tratando de tomar una decisión miro a Max quien se posiciono nuevamente detrás de ella, dirigió su atención a los demás y Sophie le lanzo una mirada de confusión.

- Ok. - dijo finalmente.

- Eli, estas segura de lo que haces. - le susurro Max en el oído.

- Si, tranquilo.

Respondió mirándolo de reojo. Sophie no sabía que sucedía con Emiliano, pero no le quedo la menor duda que sus amigos se traían algo entre manos y ella lo descubriría muy pronto.- no la tomen por chismosa - Elisa no permanecerá mucho tiempo callada.

- Habla Emiliano antes que me arrepienta.

Pidió Elisa sin el mínimo animo en su voz

- Tienen que venir con nosotros, corren peligro si se quedan aquí.

- No me digas Williams. - dijo con ironía la pelinegra.

- ¿Qué pasó?

Sophie con un movimiento de cabeza le hizo saber a Carlos que alzara las manos y este obedeció instantáneamente. Emiliano miro las manos vendas del castaño con reflejos dorados quedando en blanco, Nataly se llevo las manos al cabello tirando de el murmurando: «Ya empezó»

- Están quemadas. - continuo Soph - Carlos no lo hizo, ni siquiera se acuerda de nada. Estoy segura que fue ese demonio Williams, yo lo vi.

El la miro con los ojos bien abiertos.

- ¿Me estas tomando el pelo Sophia?

- ¡No, nadie te esta tomando el pelo! - aseguro Elisa - Todos ya lo hemos visto. Los primeros fuimos Max y yo, lo arrollamos, después fue Ben que lo vió con cortadas a carne viva, seguido de Carlos con las quemaduras y Soph, pues... Con todo lo mencionado antes.

Silencio, solo eso y un Emiliano boquiabierto.

- Que sorpresa ¿no? - lo miró Eli achinando los ojos - ¿Hay algo más que debería saber? ¿Algo que no me has dicho?

Indago con un tono frió y sepulcral. A ella se le debía temer con ese tono, los presentes lo tenían en claro menos Nataly que era nueva.

- Elisa, no me provoques. - le advirtio Emiliano con los puños a cada lado de su cuerpo, se estaba molestando, se estaba cabreando.

- ¡Pues déjame decirte que me vale mierda que te provoque y te molestes! - alzo la voz - ¡A mi ya me provocaste desde hace mucho y yo no te reclame nada, en cambio tu si! ¡Sabes que, vete a que te den!

Silencio, Soph, Ben y Carlos la miraban espantados mientras Max la miraba embobado, a el le encantaba ese carácter latino de Elisa.

- ¡Ya llegue al colmo de mi paciencia contigo! - le señalo - ¡Rebasaste el vaso y esto es la gota gorda que lo derramo! ¡No se que coño es lo que pasa contigo! ¡Pero ahora te jodes! ¡Cobarde!

- Eli, - trago grueso - cometí un error, pero por favor perdóname. - le tomó las manos.

- ¿Perdonarte? - negó soltándose de un arrebato - Gánate mi perdón porque no te lo voy a dar así tan fácil.

Retrocediendo se volvió hacia Max caminando en su dirección.

- ¡Elisa!

- No te quiero escuchar Emiliano. - sentenció.

- Entonces no lo escuches a el, escúchame a mí. - le hablo Nataly - Vengan con nosotros, ayer perdí a mi padre aquí y lo ultimo que quiero son otras muertes.

Elisa paro en seco.

- Discutí con el, esa fue la ultima vez que lo vi. Elisa, tu no quieres ver morir a tus amigos así que por favor ven con nosotros.

«¿Qué hago?» era la pregunta que rondaba su cabeza. Max noto sus dudas mientras se acercaba a ella.

- ¿Estas bien?

- ¿Crees que deberíamos ir?

- La verdad no quiero tener a Emilio cerca, pero no quiero morir tan pronto bonita. Lo que tu escojas yo te apoyo.

- Emiliano. - sonrió burlona.

- No me importa. - reprocho el rubio con un ademan de mano haciéndola reír.

Mirando a los demás que estaban parados como estatuas frente a ellos buscando una respuesta que la ayudara, Sophie asintió sabía que era lo que esperaba, después de ella la siguieron los chicos.

- Esta bien, - se giro a ver al pelinegro - voy con ustedes pero lo hago por mis amigos no porque tu me lo pides, que te quede claro. - lo señalo - Tienes razón Nataly, también lamento mucho tu pérdida.

- Eso no importa. - asintió - Ahora a a sacarlos de aquí, solo escucha a Emiliano por esta noche y si quieres después no le vuelves a hablar.

- Me parece bien. - lo miró mal, el solo agacho la cabeza.