Entre las Sombras

Cap57

En el hospital, Torres y Reyes esperaban alguna señal de Nataly. No había nada de ella en horas, ni un mensaje, ni una llamada, nada. Reyes había salida por algo de comer hace rato dejando a Torres en la habitación, pensando en lo de esa tarde haber si lograba descifrar algo de todo eso.

(- En el Bosque Prohibido hay una especie de demonio... ¿Recuerdan la carcajada que escuchamos?  Bien, era eso. Desde que la oímos nos marcaron, tendríamos aproximadamente unos días, horas, minutos o segundos para morir después que apareciera la visión...)

Silencio...

(- Ustedes dos están a salvó. Solo les pido que se queden aquí.

- ¿Y tu a dónde vas Nataly?

- A resolver unos asuntos. Los quiero mis hermanos, gracias por todo...)

«¿Por qué? ¿Por qué la prisa? ¿Por qué nada tiene una explicación?» se preguntaba, tantas incógnitas sin responder lo tenían desconcertado. Poco después Reyes volvió aparecer con dos bandejas de comida y justamente en ese instante sonó su móvil.

- Torres. - dijo tomando la llamada.

- James, - respondió un hombre a través del auricular - perdón por no llamar antes. ¿Cómo te sientes? Me entere esta mañana de lo que te paso.

- Descuide jefe, estoy bien. Con algunos raspones y un brazo enyesado pero es todo.

- Que bien, lo importante es que no paso a mayores. - asintió Malcom aunque no lo pudieran ver - ¿James, sabes algo de Nataly? No se nada de ella desde el bosque y cuando se la llevaron de la oficina. Tal vez...

«El bosque claro. Nataly iba al bosque, pero... ¿Qué tiene que ver Emiliano en todo esto? Y ¿A qué abra vuelto esa muchachita terca y cabezona al bosque? ¡Dios Nataly no puede estar más loca porque no se lo permites!»

- ¿James? ¿Estas escuchando me? ¿Sigues hay?

Preguntó Malcom confundido haciendo que Torres volviera en si.

- Ah... No, no se nada de Nataly. Tal vez este descansando o haciendo los preparativos para el funeral de Jon. En verdad no la e visto. - negó.

- Bien, si sabes algo de ella dile que me llame, necesito arreglar unas cosas sobre ese tema.

- Esta bien, yo le digo. - respondió el moreno.

- Cuídate James, espero que te mejores y déjale el miedo a la agujas.

Eso lo hizo reír.

- Así será señor.

Dicho esto James colgó el teléfono, Daniel solo lo miraba con el seño fruncido.

- ¿Por qué le dijiste a Malcom que no hemos visto a Nataly cuando sabes que no es cierto?

- Siéntate, - le ordeno Torres - vas a querer escuchar esto...