Red Canvas [Chigiri Hyoma] [CONCLUIDA]

❈ - CAPÍTULO XXVII - ❈

Se miró en el reflejo de su celular por décima vez consecutiva, asegurándose que su cabello (C\C) estuviera en orden, y que su rostro no luciera tan cansado, porque definitivamente no durmió en absoluto.

Shibuya era grande, colorido y transitando como siempre, la incomodidad de la multitud la hacía tener náuseas, combinado con sus nervios. Se apoyó por una de las paredes de las plazas comerciales y trató de mantener la calma.

Solo era una salida de amigos, no había absolutamente nada entre Chigiri y ella más que una amistad que pasó altos y bajos, distancias y problemas, era normal sentirse en las nubes, especialmente cuando se trataba del pelirrojo que, aunque ya no pintara, seguía considerando su musa.

Cada detalle de Chigiri se volvía más cautivador a sus ojos. La forma en que sus cejas se fruncían ligeramente cuando algo parecía no gustarle o incomodarle, o cómo sus labios se curvaban en una sonrisa sutil cuando conseguía lo que quería, cuando estaba seguro de sí mismo y cargando una determinación envidiable.

No tenía planeado entrar en detalles sobre su fracaso como artista, cuando el tiempo de descanso de Chigiri acabe, él regresará a Blue Lock por quién sabe cuanto tiempo, así que realmente no importaba. Ni su sueño sin cumplir, ni sus extrañas cosquillas en el estómago.

Todo era descartable.

Recordando su último trabajo, que aparentemente fue un fiasco porque no había recibido información de su paquete a Noel Noa, y empezó a pensar que posiblemente algún miembro de la oficina de correos ya se habían quedado con su paquete, o lo había perdido.
Fue un gasto de dinero y se rieron en su cara, era un hecho.

Su celular vibró, para su mala o buena suerte, cuando vio la pantalla era un mensaje de quien estaba torturando su mente y corazón en esos mismos instantes. Básicamente, era un mensaje pidiendo la ubicación de en donde estaba esperando, y que algunos de sus amigos ya se habían retirado, por lo que podrían ir juntos a algún lado en ese momento.

Mandó la ubicación, asegurándose de que fuera la exacta, sin embargo, en dos segundos una vergüenza golpeó su rostro, poniéndola completamente roja. Guardó su celular en su bolsillo y miró a sus alrededores con nervios, no sabiendo en qué dirección podría venir el chico. Golpeó su pie inquietamente contra el piso, pero no pudo resistir y comenzó a caminar en una dirección al azar, mezclándose entre la multitud.

Sentía que se estaba hiperventilando, las calles ya producían ruidos fuertes, pero solo el latido de su corazón era lo suficientemente molesto como para abrumarla, no estando preparada para su cita. Incluso si solo era una simple salida de amigos, porque habían estado separados durante nueve meses y tenían que ponerse al día, la (C/C) no estaba pudiendo tranquilizarse.

En el lienzo de su mente, ella guarda la imagen de su amigo, que ilumina su vida con su ser genuino, y en el fulgor de su cabello y la suavidad de sus ojos, encuentra el hechizo que la tiene cautiva. Se sentía afortunada de ser testigo de la esencia radiante de Chigiri Hyoma, y cada encuentro con él era un regalo para su ser, pero ahora era diferente.