Capitulo 13. Café

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CRISTIAN

Supongo que se había vuelto normal que cada segundo quisiera mirarte de cualquier manera, así estuvieras bostezando en mi propia clase, incluso si estabas discutiendo con tus demás maestras del porque te trataban de manera diferente que al resto de compañeros, era magnífico el cómo querías defenderte pero tambien me parecia triste no poder interferir , abrazarte y decir que solo eras una niña que nadie podía entender, que solo quería ser yo a quien dejaras entrar a tu cabeza y sobre explicarme el porque para ti lo más importante era escribir.

Estaba seguro que no tendría problemas contigo cuando tus padres me pidieron que te tuviera un ojo encima debido a conductas deprimentes que tenias, las lesiones en las piernas y que faltabas mucho a la escuela eran señal de que algo no estaba bien contigo, supuse que ese seria el unico problema, pero desde que empecé a mirarte como una chica y no como una alumna , mis sentimientos empezaron a desarrollarse por ti , por como mirabas, por como caminabas y ese cabello tan bonito que tenias, me moría al sentir como tu perfume pasaba a mi lado cuando tenias que decirme o contarme algo, asi solo pasaras al lado de mi me bastaba con ser feliz, pero conozco muchas reglas, eres mi alumna, y yo soy tu tan solo simple tutor.

Y ese se convirtió en el problema mas grande, el tener que resistirme y fingir que no me interesabas, tener que no desearte por las noches y evitar a toda costa mirarte diferente.

Estaba en casa realmente aburrido ,mirando la televisión, un programa de cocina, que para variar no soy bueno cocinando.

—Debo hacer algo antes de que muera mas de aburrimiento- me dije a mi mismo mientras me levantaba del sofá e iba por unas libretas, realmente no se para que, ya tenía todo listo para el dia de mañana, quizás solo por inercia. Cargue las libretas y las lleve al comedor para revisar los nombres de cada uno de mis alumnos, pero de nuevo parecía que la maldición me seguía.

"Danielle" fueron las palabras que dije entre susurros cuando vi tu libreta, no dude en abrirla y empezarla a hojear desde la primera página, como si nunca lo hubiera hecho, tenias la letra mas linda y tierna, eras una chica muy bonita.
Pero de un momento a otro parecía que me había salido de mi cuerpo para verme desde otra perspectiva y darme cuenta que estaba siendo un poco abusivo así que cerré la libreta con fuerza y me levante del comedor para ir directo al baño.

Tuve que darme una ducha con agua muy fría para poder "despertar", pero la alarma de que ya eran las 7 de la noche me hizo reaccionar más rápido.

—Eres un muerte viviente conmigo..- me reí en voz baja y deje que el agua bajara por mi cuerpo, se sentían como caricias rígidas y duras por el agua, ¿Que tal serían las tuyas niña?
Estaba seguro que necesitaba verte justo ahora, solo eso.

Mire mi celular que estaba en una esquina del lavabo, ni siquiera recuerdo haberlo puesto ahi, parecía que la misma energía lo hubiese dejado ahí...¿Para que?, Deseaba no decirlo en voz alta, salí de la ducha y me puse una toalla al rededor de la cadera pero antes de salir completamente del baño tomé mi celular.

—Si sucede algo malo culpare a Dios.

Tenía que pensar en una pequeña excusa, ¿tarea?, No, la tienes completa ¿Exámenes? No, en la mayoría sacaste puntuación alta...quizás un ¿Proyecto?, No, ¿de donde mierda sacaré ahora la gran idea de hacerla trabajar toda la noche?
Pero recordé que una vez hace mucho tiempo me hablaste sobre tu café especial con ingredientes secretos y si..¿uso esa excusa?, al carajo, el que no arriesga no gana.

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