51.

1.3K 195 114
                                    

Doyoung le pidió matrimonio a Nara y desde entonces parece que todos los días andan en luna de miel, ¡eso que ni siquiera se han casado! Johnny regresó con su familia en Chicago, aunque dijo que volvería el próximo mes. Changbin fue promovido y ahora está al mismo nivel que Minho en la compañía. Hyunjin y Han no fueron promovidos, pero obtuvieron un aumento y sobre Minho... no he oído noticias de él.

En cuánto a mí, retomaré mi curso de asistente médico a finales de enero. No, mi estado de ánimo no ha mejorado y ver que todos están atravesando una etapa de felicidad abundante me hace sentir miserable, pero ¿qué puedo hacer? Este es el camino que elegí.

Ni siquiera quiero hablar de cómo pasé mi Navidad la semana pasada. Estuvo bien, pero rompí en un llanto incontrolable y sé que esta víspera de año nuevo no será diferente. Ni modo, solo queda mantenerse fuerte, confiar en la vida y entender este proceso.

—Es víspera de año nuevo y estoy más que listo para arrasar con todo lo que pongan en la mesa.

Nara y yo nos miramos simultáneamente mientras reímos por las palabras de Doyoung. Supongo que ser glotón corre por nuestra sangre.

Sus suegros y amigos no tardarán en llegar, por eso todos estamos presentables. Estoy feliz de poder pasarla con mi hermano, pero hoy no traigo los ánimos que pensé que tendría, sobre todo porque me asusta la idea de estar rodeada de gente nueva.

No importa. Tendré que sacar mi mejor sonrisa para no arruinar la noche.

Cuando los invitados empiezan a llegar, los saludo cortésmente y les hago pasar. He contado alrededor de ocho amigos de Doyoung y aunque los conozco, Johnny es el único a quien soy cercana, así que probablemente estaré callada en todo el rato.

Dicho y hecho.

Todos hablan alegremente mientras yo estoy aquí, apretando mis manos por debajo de la mesa. No me siento excluida, ya que Doyoung y Nara me hablan de vez en cuando, es solo que estoy demasiado deprimida para igualar la energía de todos.

El único momento en el que sonreí genuinamente fue cuando Doyoung hizo un brindis y compartió unas palabras hermosas sobre Nara. Mi hermano se ganó tanto el corazón de esa chica como el de sus padres.

Hablando de padres, mamá todavía no ha respondido a mi mensaje deseándole un feliz año nuevo. No es ninguna novedad, pero sigue doliendo.

¿Cuándo fue la última vez que disfruté esta época? Probablemente cuando tenía quince años y no tenía responsabilidades ni tantos problemas.

Oh, me estoy deprimiendo aún más.

—Bueno... —Doyoung se pone de pie—... Yo opino que deberíamos movernos a la sala para seguir festejando más cómodos.

Todos concuerdan con él mientras se levantan de sus asientos.

—Dodo —le llamo en voz baja—, iré afuera para hablar con mis amigos. Volveré en un rato.

Eso no es más que una excusa para estar a solas.

—Claro, hermanita.

Me abrigo adecuadamente antes de salir, pero aun así la brisa fría me hace estremecer un poco. La noche está hermosa, el cielo está despejado y se puede apreciar una que otra estrella difusa. Creí que estaría nevando más fuerte hoy, sin embargo, la grama está cubierta solamente de una delgada capa nívea.

Lleno mis pulmones de aire y lo expulso por la boca, formando una pequeña nube de vaho. De niña me emocionaba al ver esa bruma mientras jugaba con la nieve. Oh, cuánto daría por revivir un momento de esos.

Grietas del Corazón ; Lee MinhoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora