-No te preocupes, es lo único que podíamos hacer, por la chica tan dulce que nos ha servido estos deliciosos cafés- dijo el de la cicatriz sonriendo coquetamente.-Bueno lo mínimo sería pagar creo yo- dijo Beca- el resto va más allá de lo mínimo.
-Qué quisquillosa eres, con un gracias me basta…- dijo sin finalizar la frase con la intención de conocer el nombre de la mujer.
-Beca, me llamo Beca y perdón por ser tan quisquillosa señor.
-Me haces sentir mayor, apenas tengo 26 años, no cuarenta- dijo riendo.
-No creo que sea mala idea que no paguemos el café- habló el rubio.
-Ya Koko es que tú solo piensas en dinero- respondió el azabache riendo.
Ahora que se fijaba este tenía los ojos bicolores, uno más blanquecino que otro como si fuera un ojo ciego, bastante curioso, aunque más curiosidad le daba la procedencia de su cicatriz.-No te preocupes, te pagaremos.
-¿Nos vamos ya? Takeomi nos está esperando en la oficina- dijo acercándose el de pelo rosa, el cual tenía también aquellas características cicatrices.
-Sí yo creo que es mejor no hacer esperar a Takeomi y al resto- respondió el hombre semitrajeado de antes y cabello violeta.
-Bueno¿Cuánto es?- preguntó el chico del tatuaje en el cuello y pelo negro.
Una vez ya había cobrado los cafés y las galletas insistiendo repetidas veces en que ella les podía invitar los hombres se despidieron cordialmente de ella y salieron. Beca recogió la cafetería y lavó todo antes de salir. Hoy cerraba al medio día porque tenía que ir a comprar unas cosas para su nuevo piso ahora que se iba a tener que mudar en breve.
Se dirigió al metro para acercarse a la zona comercial de la ciudad donde había un gran centro comercial repleto de numerosas marcas y productos, compró algunas perchas, vasos, clavos, tornillos y separadores para los cajones a parte de algo de ropa, cuando su teléfono empezó a sonar.
-¿Sí?- respondió ella sin mirar de quién se trataba.
-Beca soy yo, era para preguntarte si has visto a Hinata en el día- respondió su viejo amigo por el teléfono.
-La verdad que no Takemichi, ayer me la crucé en la cafetería pero hoy no la he visto¿Por?
-Estaba pensando en que podía darle una sorpresa por nuestro aniversario, al fin lo paso a su lado.
Esto último le había sonado raro a Beca, Takemichi siempre pasa los aniversarios al lado de Hina, no entendía este repentino "al fin lo paso a su lado" pero bueno a Takemichi a veces se le iba un poco la cabeza desde su punto de vista.
-Sí claro… sobre eso Take, estaba pensando en esos tipos con los que te ves últimamente, Hina está preocupada por ti. Y la verdad no creo que sea bueno juntarse con bandas.
-Beca, tú no les conoces, llegaste mucho más tarde que ellos como para haberlos conocido y saber por lo que hemos pasado, yo sé que son de fiar.
-Takemichi un hombre nunca va a ser de fiar, no me lo tomes personal y mucho menos con un arma- dijo Beca irónica ante la confianza de su amigo en bandas.
-Sí Beca, no tengo mucho tiempo para debatir los caminos de mi vida contigo ahora mismo, si ves a Hina dile que me llame por favor.
-Okey- respondió Beca dulcemente, para después colgar- la verdad Takemichi está un poco loco- pensó para sí misma.
Ya habiendo comprado todo lo que necesitaba llamó al dueño del piso que iba a alquilar para confirmar los trámites, pero no sé lo cogió por lo que dejó un mensaje en su contestador para que la llamase en cuanto pudiese.
Siguió caminando por el centro comercial y vio a lo lejos unos tipos de pintas bastante dudosas, por lo que prefirió rodearles, al parecer uno de los hombres se dio cuenta, era alto con el pelo rapado y azul y un dibujo en su cabeza, se le quedó mirando mientras estuvieron de frente hasta que finalmente los rebasó ya que iban en sentidos contrarios. Eso de que la ciudad se estuviera llenando de maleantes no era una de sus cosas favoritas por muy guapos que fueran.
Mientras caminaba se preguntaba si Takemichi conocía a aquel hombre de cabello azul o quizás a alguno de los hombres trajeados del restaurante, de los cuales sólo recordaba un nombre "Koko" pero imaginaba que sería un diminutivo del nombre, pero, ¿cuál sería?
Pasó por casa a dejar unas cosas y empacar algunas otras se supone que este finde semana al fin podría mudarse a su nuevo apartamento si todo iba en orden. Después de meter la mayoría de cosas en cajas almorzó, aunque un poco tarde se habían hecho las seis con tanto ajetreo.
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Los hombres de traje (Boten x TN)
De TodoUn día aparecen en tu cafetería unos hombres de traje a los que no habías visto en tu vida por la ciudad, con la extraña coincidencia de que ahora parece que están en todas partes, pero quién estuvo donde no debía fue Beca la noche en la que escuchó...