#QSMP
๑ˇ. * . .── Algunas cosas no son como uno las piensa, las elobora o las planea, uno simplemente reflexiona, y al abrir los ojos, nota que la personas. que tanto buscaba... siempre estuvo ahí, a su lado. ──
║▌⛓️│█║▌│ █║▌│█│║▌║
││ . *❥ஓீ͜͜͡•➢ Se...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Aquel gran alfa miraba la lejanía, una mirada perdida que significaba mucho para sí mismo, pero para quienes miraban al híbrido de tortuga realmente era extraño aquel comportamiento, que era mas que curioso… Etoiles no llegaba a comportarse de una manera fría, o distante, incluso nunca lo verías de esa forma, como ahora.
Y es que era en esos momentos de soledad donde su mente volaba y se dejaba llevar por sus pensamientos. Pero esos pensamientos ahora eran preocupaciones que nunca quiso demostrar, y era por eso que siempre se alejaba de todos para no causar un mismo efecto sobre de él, no lo necesitaba.
El fuerte aroma de vino y aquel dulzor a arándano le daba la idea de quien se trataba, volteo a la dirección y ahí era donde miraba a la bonita pareja recién casada, Roier y Cellbit.
El olor a fruta, tan dulce, con ese picor que daba varias sensaciones, feromonas de omega que desprendía Roier una vez se acercó. Mientras que el tan fuerte a la fermentación de las uvas picaba agradablemente y ese toque extravagante pero agrio que le daba el alfa de Roier, Cellbit.
── ¿Todo bien? ── sintió el toque de Roier sobre sus manos.
Etoiles levanto la mirada a la pareja, una mirada preocupada por parte de ambos, algo que no había querido dar a los demás por su mirada perdida.
── Se podría decir que sí ── respondió dubitativo, en verdad quería desahogarse, pero ahora tenía muchas cosas en la cabeza que no estaba completamente seguro si contarlo o no.
Roier es de fiar, ¿verdad?
── Cuentalo, podríamos ayudarte si nos dices que pasa ── fue ahora el turno de Cellbit, abrazando por los hombros a su omega.
Etoiles suspiro, realmente seguía con tantas dudas en la cabeza que ni siquiera entendía mucho sobre el tema, y ver a Roier; tal vez, si se lo podía contar a él entendería mejor, pero no sabia si Cellbit podía ser de confianza o si podía decirlo tan a la ligera.
── Ammh… pues… ── tartamudeó, sintiéndose algo avergonzado por su comportamiento tan cohibido ── Es Quackity ── confesó, viendo esta vez a Roier.
Sabia la amistad que ambos omegas tenían, pero tampoco quería preocupar de mas al arácnido.
── ¿Qué le sucede a Quackity? ── escuchó la voz de Roier, y; en efecto, se mostraba más preocupado.
── Es lo que no sé ── respondió una vez que no pudo ante la mirada del castaño, tan preocupado y desesperado por el bienestar de su amigo ── Hace días ── suspiro, tratando de ver otro punto que no fueran los ojos avellana de aquel mexicano, miro a Cellbit quien le miraba fijamente, esperando una respuesta del francés, y el aroma del brazileño tuvo que intensificarse debido a las feromonsbque comenzaban a tener un aroma más agrio de lo que debía tener.
── Por favor Etoiles, dinos ── escuchó al alfa felino que tomo ambos hombros de su omega y tratar de calmarlo con su aroma, arroparlo con un abrazo de feromonas que pudieran tranquilizarlo.
── Quackity hace días que no duerme bien, me preocupan sus horas de sueño ── confesó.
No quería decirlo, pero tenia que, ya tenia la presión sobre sus hombros y tratar de aligerarlo era lo único que podía hacerlo respirar.
── ¿Viven juntos? ── escucho la voz impresionada de Cellbit, a lo que Etoiles solo negó ── ¿Entonces?
── ¿Qué le pasa a Quackity? ── fue ahora el turno de Roier.
Etoiles miro a la pareja, suspirando de manera pesada.
── No vivimos juntos, solo que la gran mayoría de veces, Quackity suele venir a mi casa a dormir. No le gusta dormir solo y me pidió el favor ── explico brevemente el francés ── Y hace un par de días, Quackity no ha podido dormir, a veces se va a media noche, incluso a las dos de la madrugada y me preocupa, porque nunca me dice a donde va y regresa hasta la noche del día siguiente y pasa lo mismo, no duerme, apenas se acuesta y duerme un par de horas, pero después se levanta y se va sin siquiera decirme algo. Traté de seguirlo un día pero de alguna forma siempre logra irse, como si se desvaneciera por completo ── finalizó, cruzándose de brazos, bajando la mirada y con la tristeza reflejada en su rostro.
── ¿Duermen juntos? ── escucho a Roier, Etoiles negó aquello.
── siempre le doy su espacio, le hice un cuarto en mi casa para que pudiera dormir en mi casa cada que quisiera. Pero, como les digo, no ha podido dormir y se va.
── Creó que sé que le pasa ── Roier tomo la mano de su marido, apretando la misma, queriendo algo de apoyó y claro que la obtuvo una que vez que sintió el apretón gentil de Cellbit sobre la suya.
── ¿El qué?
── Esta noche duerme con él.
── ¿Qué?
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
