Lucia
-Creo que ma va a dar taquicardia- dice Verónica a mi lado.
-¿Y eso porque?
-¡Porque estoy nerviosa!
-No deberías- digo volviendome al espejo frente a mi.
-¡Es tu nueva coronación Lucia! ¡Luego de 500 años!- suelto una risita ante su voz chillona.
-No es la gran cosa-le resto importancia- tu tomate un tecito para que se te pase el estrés.
-Tu allí toda tranquila y yo aquí con los nervios de punta, increíble- camina hacia una de las mesitas de la sala.
-Me e tomado un té hace como dos horas para el estrés que cargo, tu haz lo mismo.
Le pide a una de las mujeres que me estaban arreglando el cabello que vayan por una taza de te para ella y sonrió divertida cuando chilla de la emoción cuando traen una de mis coronas reales, la principal para ser más exactas.
-Mira Lucia, que bonita- me giro y veo a la hermosa corona de oro con diamantes rojos y negros.
Cuando la mandé a hacer hace cientos de años pedí que fuera una réplica parecida a la de mi padre, la misma corona que estaba guardada bajo llave en un castillo, en la corte vampirica.
Quise hacerle honor a mi padre así que exigí que fuera jan réplica pero para mujer y puedo decir que casi me caí de culo cuando la ví porque era extremadamente parecida, solo que los diamantes de la de mi padre era azules como sus ojos, en mi caso como la corona es de oro y ya es dorada los pusieron rojos sangre como mi color de ojos cuando sale mi parte demonio.
Esta vez e pedido una que fuera parecida a esa pero con diamantes blancos en lugar de negros, y que el oro fuera blanco y se que la corona que cambiaré ahora que seré la reina de los demonios será aún más preciosa e intimidante que la principal. Y le agregué un detallito más pero eso es algo que la gente vera cuando la tenga encima de mi cabeza.
Claro, eso de las coronas es una niñeria pero que a todos les gusta por alguna extraña razón.
Tal vez no saben todo lo que pesa una corona de oro en tu cabeza por horas solo para echar pintas y verte bien, cuando al principio te duele la cabeza horrible pero ya después te acostumbras, años después obviamente.
Almenos esa mierda no va todos los días en mi cabeza.
-Se les saldrá la baba- suelto un resoplido de burla ante la ridiculez de Verónica.
-Creo que te mandaré a hacer una para que veas que no es la gran cosa.
-Es la gran cosa pero tú lo ves normal porque tienes miles de toneladas de oro en una bóveda en la corte.
-Me gusta el oro pero no es mi mayor tesoro la verdad- sonrió.
Me levanto y camino hacia una de las doncellas y ella se estira para ponerme la corona en la cabeza y siento el peso de la misma cuando la tengo encima pero lo ignoro, me giro hacia el espejo frente a mi para poder contemplarme en el.
Me veo buenísima.
Escogí un vestido rojo sangre, es de tirantes de tela lisa con escote de en V, tiene tiras en la espalda que lo ajustan a mi espalda dejando espacios descubiertos que hacen ver mis tatuajes y con una larga falda hasta mis tobillos con una raja en la pierna derecha que le da el toque sexy pero elegante.
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Corona Sangrienta #1 [En proceso]
VampireUn chico que llega a un instituto que está escondido del mundo. Lo llevan allí para que saque que vea sus peores demonios y los que ahí en ese lugar, dónde resulta que detrás de sus muros no ahí personas normales, si no seres del mundo sobrenatural...