¿Qué pasaría si Elizabeth Swan tuviera una hermana? ¿Qué pasaría si Will Turner finalmente se enamora de Scarlett Swan?
La maldición de la Perla Negra [Completada]
El cofre del hombre muerto [Completada]
El fin del mundo [Completada]
La Venganza de...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
Los tres se encontraban en un bote, adentrándose a la cueva en la que Barbosa estaba con su tripulación.
— ¿A qué código debe acogerse Gibbs si ocurre lo peor? — pregunta Will después de ver un esqueleto cerca de ellos.
— Al de los piratas. — responde Sparrow remando. — Cualquier hombre que se queda atrás, se deja atrás.
— ¿Eso incluye a mujeres? — pregunta Scarlett sentada frente al joven Turner.
— Las mujeres no son piratas. — se ríe Jack cuando el bote se detiene.
— Normal. — suspira la morena bajando del bote sin esperar a los otros dos. — Tendrían que aguantar a idiotas como tú todos los días.
Sparrow baja del bote indignado caminando detrás de la chica mientras Will rueda los ojos y los sigue. Scarlett camina entre las grandes rocas guiándose por los leves murmullos que se escuchan a lo lejos.
— No deberías tentarme. — dice Jack detrás de ella. — Puedo matarte ahora mismo.
— Inténtalo. — lo reta Scarlett, volteando para quedar cara a cara con el pirata
Jack detiene su caminata mirando desafiante a la morena.
— ¡Eh! — Will se interpone entre los dos. — He escuchado algo.
Scarlett se sube sobre una roca encontrándose con Barbosa y su hermana subidos en una montaña de objetos de oro, rodeados por toda la tripulación.
— Elizabeth. — murmura Scarlett llamando la atención de los otros dos hombre que enseguida se acercan a observar.
— ¡Aqui está el tesoro maldito! — exclama Barbosa dejando ver las monedas de oro en un cofre frente a Elizabeth.
— Jack. — lo llama Will cuando Barbosa señala a la rubia.
— Aún no. — dice Sparrow. — Hay que esperar el momento oportuno. Quedaos aquí y no hagáis nada estúpido.
Jack desaparece por entre las rocas, dejándolos solos.
— No confío en él. — murmura Scarlett, agarrando una piedra del suelo y siguiendo el camino por el que el pirata se había ido.
Cuando la chica ve la espalda de Sparrow, no duda en golpearle la cabeza con la piedra haciendo que caiga al suelo inconsciente.
Entonces, Barbosa hace un corte en la mano de Elizabeth manchando de sangre el medallón de oro para dejarlo caer sobre el cofre.
Will agarra la mano de Scarlett y la guía por entre las rocas.
— ¿Tu padre se llamaba William Turner? — pregunta enfadado Barbosa agarrando a Elizabeth por los hombros cuando nota que la maldición no se ha roto.
— No. — responde Elizabeth. Scarlett mira a Will ante la mención de su padre.
— ¿Dónde está su hijo? — vuelve a preguntar el capitán. — El hijo que navegó desde Inglaterra hace ocho años y por cuyas venas corre la sangre de William Turner. ¿Dónde está?
Cuando Elizabeth no responde, Barbosa golpea su rostro haciendo que la chica caiga inconsciente a un costado de la montaña de oro.
Scarlett se lanza al agua sin pensarlo y nada hasta su hermana siendo seguida de cerca por Turner.
— Lizzie. — la morena zarandea levemente a su hermana.
— Scar. — Elizabeth sonríe antes de obedecer las señas que Will le daba para adentrarse al agua con ellos.
— Seguidme. — dice Will cuando salen del agua y se adentran de nuevo a las rocas.
— ¡Se ha llevado el medallón! — exclama Barbosa haciendo que toda la tripulación grite y se disperse para buscarlos.
Cuando llegan al bote con el que habían llegado, Scarlett ayuda a su hermana a subir mientras Will comienza a remar hasta llegar al Interceptor.
Cuando suben al barco, toda la tripulación los está esperando.
— Bienvenida abordo, señorita Elizabeth. — dice Gibbs dando un paso hacia adelante.
— ¿Señor Gibbs? — pregunta la rubia sorprendida cuando lo reconoce.
— Oye, ¿dónde está Jack? — pregunta Gibbs.
— ¿Jack? ¿Jack Sparrow? — dice Elizabeth incrédula mirabas a su hermana.
Will y Scarlett se miran antes de que ella hable. — Se ha quedado atrás.
Scarlett agarra el brazo de su hermana y la acompaña hasta el interior del barco para curar su herida y después dejar que descanse en una habitación.
— ¿Cómo está? — pregunta Will cuando Scarlett entra a su habitación y se sienta a su lado.
— Sorprendentemente bien. — responde la morena. — Gracias por ayudarme a encontrarla, Will.
— Os conozco desde hace años a ambas, no me quedaría de brazos cruzados. — afirma el chico. — Y siempre te ayudaría, a lo que sea.
Scarlett sonríe y acaricia la mejilla de Will mientras el descansa sus manos en las piernas de ella.
— Scarlett. — susurra él acercándose a su rostro.
— ¿Mhm? — murmura ella mirando los labios del chico.
— Te amo. — esas palabras hacen que Scarlett mire los ojos del chico que brillaban a causa de la luz de las velas.
— Yo también te amo, Will Turner. — dice la chica antes de unir sus labios con los de él.
Will agarra el rostro de la chica profundizando el beso antes de que ella se separe.
— Will. — dice Scarlett, sacando de su costado el medallón que Elizabeth le había dado hacía unos minutos.
— Creía que lo perdí el día que me rescataron, me lo regaló mi padre. — murmura él agarrando el medallón entre sus manos. — ¿Por qué lo tomásteis?
— Temíamos que fueras un pirata. — responde sinceramente Scarlett.
— No necesitaban la sangre de Elizabeth. — habla Will comprendiendo todo. — Sino la de mi padre, mi sangre, la sangre de un pirata.
— Lo siento, Will. — dice Scarlett cuando ve como él aprieta con fuerza el medallón en su mano.
Will da un fuerte golpe a la mesa. Scarlett lo mira fijamente a los ojos pero él sale de la habitación.
