Mi sangre recorriendo por tus venas

Epílogo

— No puedo creer que yá estemos en según grado — chilló emocionado Jimin — ésto de escoger la misma universidad fué buena idea.

— ¡Nisiquiera se por que estoy caminando hasta el auditorio por una simple charla de profesores! — renegó — ya los conocemos a todos, ¡Ésto es culpa de los de nuevo ingreso!, ¡Deberían presentar a todos los profesores por medio de archivos yo que sé!.

— Para el colmó es entrega de diplomas para los "inteligentes" — Jimin soltó con burla.

— No sé a qué voy si no voy a obtener ni un severo aplauso.

— Con mis encantos, con suerte y obtengo halagos — presumió Seokjin.

— Tus calificaciones son un asco Seokjin, no comprendo como algunos profesores pueden amarte.

— La fortaleza de ser guapo y encantador — sonrió, meneando sus pestañas.

Los tres amigos caminaron hasta algunos asientos disponibles, apenas llegaron él director empezó a dar su plática aburrida sobre lo encantado que estaba de que los nuevos ingresados eligieran esa universidad.

Después empezaron los maestros a presentarse, regalando una que otra frase "motivadora".

Unos que otros alumnos aplaudían y otros no muchos aprovechaban para dormir, charlar o maquillarse.

De lo aburrido el grupito de tres decidieron salir e ir a comprar algo de comer, tanto de escuchar habladera les dió hambre.

Él director agradeció a los profesores y empezó a nombrar a los inteligentes que obtuvieron diploma, después a los ingresados que obtuvieron un buen puntaje.

Uno de ellos destacó en la multitud, por su belleza y por el asombroso puntaje que obtuvo.
Él director volvió con su charla motivadora y les dió la bienvenida a los de nuevo ingreso.

Hoseok, Jimin y Seokjin entraron nuevamente al auditorio con comida, arrepintiendo se cuando las motivadora plática del director duró unos 40 minutos.

— Les deseó un excelente día a todos — finalizó el director.

Todos los estudiantes se pararon para empezar a caminar hasta la salida.
Seokjin mastico rápido cuando unos que otros conocidos lo saludaban.

— ¡Mi estómago está tan llenó que explotare en cualquier momento! — avisó a sus amigos, y rápido volteó a disculparse con la persona que había golpeado con su codo sin querer — lo siento.

Un pelinegro volteó a verlo, sonriendo, pero está sonrisa suavizó al conocer el rostro de Seokjin.

— ¿Jinnie? — Namjoon se arrepintió de llamarlo de esa forma.

— ¡Hey Namjoon! — Hoseok regalo palmadas a su espalda — Woow me alegra volver a verte.

Seokjin bajó la mirada y sonrió un poco, su corazón empezó a palpitar al ver a Namjoon juntó a él.

Después de aquel sucedido, Namjoon juntó a su familia se mudaron a su antigua casa, por lo que dejó de tener contacto con Namjoon.

Le daba miedo tener rechazó al enviar un mensaje, por lo que nunca obtuvo una charla con él.
Kim Namjoon también sintió lo mismo, y tampoco de atrevió a enviar mensaje.

Namjoon sonrió abochornado, Jimin y Hoseok no dejaban de hacerle preguntas.
Miró a Seokjin que miraba un punto fijó, aún con una leve sonrisa en su rostro.

Presionó sus labios al no saber cómo dirigirle una palabra. Jimin observó al pelinegro y después a Jin, jaló a Hoseok de la camisa y cuando esté estaba a nada de protestar, Jimin se adelantó a hablar.