『Capítulo 22』

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Después de unos minutos, decidí salir del departamento y fui directamente a la cafetería en donde trabaja Seungmin puesto que deseo distraerme ya que tengo demasiados problemas en mi vida que me generan mucho estrés. Debo admitir que me siento bastante cómodo en casa de la familia Bang, pero eso es solo una ilusión que pronto va a desaparecer por lo que debo hacer hasta lo imposible con tal de despegarme de ellos antes de que sea demasiado tarde.

Debería registrarme en esas aplicaciones de citas para conocer alfas que deseen un omega defectuoso puesto que es la única manera que existe para al fin tener pareja. Aunque, también existe la opción de alquilarme para obtener dinero fácil sin esforzarme demasiado pues solo tengo que dar mí cuerpo a cambio y eso es todo. No creo que sea tan difícil salir con distintos alfas que solo buscan unos momentos de diversión y satisfacción.

—¿Por qué la cara larga? — me preguntó Seungmin tan pronto entré a la cafetería.

—Me siento fatal— admití.

—¿En qué aspecto?

—En todos los posibles— bufé.

—¡Ya llegué! — anunció Changbin tan pronto apareció en el local.

—Eso es bastante obvio— murmuró Minnie.

—Chicos, ¿qué les parece si vamos a divertimos un poco?

—¿A dónde? — le pregunté.

—¡A un antro! ¿Qué dicen? ¿Están dentro?

—Claro que sí— respondí mientras me ponía de pie.

"Es justo lo que necesito para olvidarme de mis jodidos problemas durante unos momentos", pensé.

Decidimos tomar un taxi para ir directamente hacia uno de los antros más concurridos de la ciudad. En estos momentos, considero que he tomado la mejor decisión y estoy dispuesto a embriagarme hasta perder la conciencia por completo porque el alcohol suele ser una excelente compañía cuando todo se encuentra jodido.

Y después de tomarme dos cervezas, pedí otras tres puesto que deseo olvidar todas las mierdas de las que he sido el protagonista en toda mí jodida vida que se va volviendo cada vez más mierda. Evidentemente, nunca tendré un maravilloso y perfecto alfa a mi lado y todo es a causa de que, en el pasado, fui abandonado y eso me ayudó a joder mi vida por completo.

Y lo peor de todo es que sé el motivo por el que fui abandonado a tan corta edad y me odio demasiado ya que no puedo hacer nada para cambiar mí destino. "¿Por qué no pude ser normal como el resto de los omegas? ¡Todo hubiera sido más fácil para mí!", me quejé en silencio. He mantenido en secreto el defecto que tengo puesto que seguramente, las personas no dudarán en burlarse de mí y no quiero revivir el pasado.

—Amigo, ¿ya olvidaste que eres intolerante al alcohol? — me preguntó Minnie mientras intentaba alejar la botella de cerveza, sin embargo, lo impedí.

—No— respondí tras tomar la botella en mi poder.

—¿Entonces por qué no dejas de tomar?

—No arruines mi noche— me quejé.

—Sí, Minnie— habló Changbin —No nos arruines la noche. ¿Por qué no disfrutas al máximo?

—Porque si lo hago, ninguno de los tres llegaremos a salvo a nuestros respectivos hogares— respondió con obviedad.

—Yo no estoy ebrio— aseguré.

—¿Quién mierda preguntó eso?

Arrastré la mirada hacia Seungmin y respondí—: No tengo ni la menor idea.

—Minho— me llamó Binnie —¿Qué te parece si hacemos una apuesta?

—No puede ser— murmuró Seungmin.

—¿Qué clase de apuesta?

—Ve y pídele el número a ese chico. Y si lo obtienes, te daré cien dólares. ¿Estás dentro?

—¡Claro! — exclamé mientras me ponía en pie.

—Minho, eso es peligroso— me advirtió Seungmin, sin embargo, no le presté atención y comencé a caminar hacia el chico que ha sido señalado por Changbin.

Evidentemente, deseo tanto ser elegido por un alfa que al menos, muestre interés durante unos momentos antes de contarle toda la mierda que ha estado presente en mi vida y considero que, ese chico atractivo podría ayudarme a olvidar todos los problemas que tengo sobre mi espalda.

—Hola, ¿me puedes dar tú número? — le pregunté al chico de cabello rosa que soltó una risita. —¿De qué te ríes? No te conté un chiste— me quejé.

—¿Estás seguro de que quieres obtener mi número?

—¡Por supuesto! ¿Qué hay de malo con ello?

—¿Cuál es tú nombre?

—Soy Lee Minho— respondí —¿Cuál es el tuyo?

—Yo soy... ¿Estás bien? — me preguntó tan pronto me tomó del brazo para evitar que cayera de nalgas al suelo.

—Eso creo— murmuré e intenté alejarme de su agarre, pero eso no fue posible a causa de que lo intensificó sin lastimarme.

—Toma asiento— me pidió mientras me cedía su silla y no dudé en acatar su petición. El pelirosa decidió sacar su número y después de enviar un mensaje, dirigió su mirada hacia a mí y me dijo—: ¿Te gustaría dar un paseo nocturno?

—¡Claro! — respondí sin pensarlo dos veces.

"Esta es una oportunidad que no puedo dejar pasar", pensé en silencio.

𝙳𝚘𝚞 𝚢𝚘𝚞 𝚕𝚘𝚟𝚎 𝚖𝚎 🦋 𝚌𝚑𝚊𝚗𝚑𝚘Donde viven las historias. Descúbrelo ahora