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de algo que si estaba seguro seonwoo, era que por mas que intentará no caer en los encantos de alguien, había caído por completo por sunghoon. estaba mas que claro que la atracción no era algo del momento, pero mas aun adoraba poder ver los monotonos que podían ser incluso cuando estaban comiéndose la boca.

tomo su celular y repiqueteo su pantalón deduciendo en si había guardado el dinero para poder comprar algo de comida, pero al ver que no era así, maldijo por lo bajo.

atravesó la horda de gente que había en su salón y al tratar de escapar de todo aquello, se cruzó con nikie, quien sin dudas trato de hablar con él pero le esquivó como el mejor, porque siendo sinceros había sigo una ofensa para si mismo que se haya enojado por unos rumores, esperaba estar haciendo lo correcto.

observó a lo lejos como sunghoon conversaba con sus amigos, no fue bastante tiempo hasta que esté se vio encontrado con la mirada de sunoo, le sonrió maliciosamente y saco su celular mandado un mensaje, lo agitó levemente para que vea sus notificaciones.

“te veo atrás del salón de educación física”.

sonrió derroto, porque sabía que siempre le haría caso, sin importar lo que estuviese pasando en el momento.

comenzo a caminar dando saltos de alegría, hacia días que no pasaba un tiempo a solas con sunghoon, y la realidad era que adoraba estará solamente con él, siempre y cuando se tratase de él estaba feliz y onrado de ir detrás suyo.
empujó la puerta pesada y entro mirando como estaba en completo silenció y vacío la cancha, aquella cancha solo se usaba cuando llovía y no podían hacer afuera educación física, así que por el momento nadie les molestaría. arrastró sus pies hasta detrás de las gradas encontrandose con sunghoon, quien estaba medio sentado en una mesa que yacia ahí mismo. al verlo sonrió enternecido, como si hacia meses que no se veían.

—¿Qué sucede? — preguntó nervioso al ver como el mayor solo escaneaba su pequeño y abstracto cuerpo.

—Solamente tenía ganas de charlar contigo. Ya sabes..

sunoo río fuertemente porque sabía que era lo menos que quería hacer con él.

—Yah, seguramente. Te creo.

se apoyó en una de las paredes mirando de reojo a sunghoon, esté ni siquiera hacía nada para hacercarse hacía él, pero por parte lo agradecía porque no estaba del todo cuerdo, y aun seguía insano por el beso de hace días que habían teniendo. un milagro para él, pero que ciertamente le ganaba porque no quería que aquel beso sucediera así, en realidad estaba con un poco de alcohol en su sistema así que no podía culparse del todo, pero tampoco podía llamarlo como un “error” porque era lo que mas deseaba hacer desde que lo conocía.

—¿Por qué no me crees? — pregunto de la nada disociado.

—¿Qué cosa?

frunció el cien sin entender a que venía aquella pregunta.

—Que quiero hablar contigo.

—No lo se. Quizás porque suena demasiado irreal.

—¿Demasiado? No lo creo. Es solo... hablar. — suspiro y hecho su cabello hacía atrás—. Apuesto a que para ti es normal. ¿No? No creo que seas un ratito que no hable casi con las personas.

—No, como crees, solo me comunico con señas de humos y, de vez en cuando con señas de manos. — dijo sarcásticamente.

sunghoon río y finalmente lo miro, solo que me está vez en su mirada había algo mucho mas allá de solo encantó, quizás curiosidad.

—¿Puedo preguntar algo?

lo sabía.

—Adelante.

𝘾𝙧𝙪𝙣𝙘𝙝. Donde viven las historias. Descúbrelo ahora