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𝐘a estábamos en la joda y todavía no me pude acercar a ella literalmente esta rodeada de todos sus amigos y no la quiero molestar pero a la vez le quiero ir a hablar mientras la miraba fijo pude ver que fue a la barra a pedirse un trago, es mi momento pensé en lo que me acercaba me puse nervioso no se que me pasa con ninguna mina me sentí así siempre fui chamuyero o como muchos dicen 𝐦𝐮𝐣𝐞𝐫𝐢𝐞𝐠𝐨 pero con ella era distinto.
– me das un gin tonic por favor -pude escuchar que pidió, tiene una voz re serena y con razón con la cara de ángel que tiene. – Lo mismo que la muchacha por favor -le dije al barman haciéndome el canchero, pude ver que clara me dirigió una mirada leve pero no dijo nada- – Así que clara no? -pude ver que se sorprendió cuando le hable por su nombre. – Mmm si -dijo tomando un sorbo de su trago- veo que investigaste. – Y con lo linda que sos quien no querría saber de vos- pude ver como se puso roja medio ternura- – rápido sos -dijo soltando una risa- – Bueno discúlpame si queres vamos lento, soy guido el de airbag. –Encantada soy clara.
𝐄n cuanto empezamos a hablar pude ver lo simple que era, y lo hermosa también sus labios eran perfectos y sus ojos tienen un color hermoso más su cuerpo que es perfecto, diría que es una de las minas más lindas con las que me hable, estábamos tan concentrados hablando sobre la banda, me dijo que le gustaba nuestras canciones sus favoritas eran 𝐯𝐢𝐯𝐚𝐦𝐨𝐬 𝐞𝐥 𝐦𝐨𝐦𝐞𝐧𝐭𝐨 y 𝐜𝐢𝐜𝐚𝐭𝐫𝐢𝐜𝐞𝐬 me asombro que no dijo cae el sol y por mil noches casi siempre son esas las que me nombran
𝐍o podía dejar de escucharla hablar hasta que nos interrumpió 𝐞𝐦𝐢𝐥𝐢𝐚 me saludo a mi y le dijo que vaya a la ronda así bailaban un rato, me pregunto si quería ir pero siendo sincero no me gusta la música que se suele bailar en jodas obviamente aveces las bailo pero no son de mi agrado, así que no me toco otra que volver con mis hermanos mientras les contaba la situación no podía despegar mi mirada de ella bailaba tan sensual que tenía miedo en tener un problema ahí abajo se que suena desagradable mas si nos ponemos a pensar que le llevo doce años pero era imposible no poder mirarla viendo como bailaba hasta abajo con las demás chicas.
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𝐌ientras bailaba trataba de ver donde estaba guido me había asombrado lo interesante que era me hubiera gustado quedarme un rato más hablando con él pero el deber me llama, cuando me canse de bailar me fui a sentar un rato con el grupo, apenas me senté no me paraban de llenar de preguntas, me preguntaban si me gustaba, si estaría con él y cosas que nada que ver.
–Así que a la nena les gustan los mayores eh -dijo 𝐝𝐮𝐤𝐢- –Ay cállate hablamos nada más, aparte que tan grande es que te preocupa. –Y me parece que tiene treinta y cuatro -dijo riendose-
𝐓reinta y cuatro yo pensé que tenía veintiséis como mucho,se mantiene bastante bien para su edad, pero eso no quitaba lo interesante que me parecía, lo empecé a buscar con la mirada hasta que lo encontré en una mesa con sus hermanos y otros cantantes parecía entretenido hasta que nuestras miradas chocaron y pude ver como me guiñó un ojo al instante me puse roja de los nervios provocando que él se ría y que me tire un beso sacándome una risa.
