26

309 37 64
                                    

Desde las ventanas del patio de entrenamiento de Stray Kids, se veía como el sol comenzaba a desaparecer, Jeongin y Changbin llevaban ya varias horas de intenso entrenamiento.

— Creo que ya se en que fallas — Jeongin se giró a mirarlo atentamente, casi como si le fuera a revelar el secreto de la vida. — Te falta concentración y conexión con tus emociones.

— ¿Ahora en mi idioma? — Changbin se sentó, esperando que el chico lo hiciera también antes de hablar.

— No solo se trata de tener un poder y ya, sino lo que estás pensando y sintiendo cuando lo usas, necesitas tener un objetivo, estar en calma, concentrado en lo que tienes que hacer y nada más, y no descontrolarte por ira, odio... ¿Entiendes? — El héroe sentía que hacía cinco días le habían entregado un niño, y querían que él lo convirtiera en un adulto, tenía que explicarlo todo con mucha calma para no alterarlo y fácil para que lo entendiera. — ¿Cuándo crees que se te da mejor atacar a un objeto?

— Cuando me siento en peligro o se que mis amigos están en peligro

— Es algo por donde podemos comenzar a trabajar. — Jeongin se mordió la mejilla por dentro, recordándose a si mismo que debía colaborar con los héroes si no quería que pasara exactamente lo mismo que la última vez, debía poder confiarle su vida a ese chico, tenía que conocerlo más.

— ¿Siempre quisiste ser un héroe? 

— Si, supongo... Bueno, más o menos. Nací en una familia rica, así que mis primeros años se puede decir que vivía en una burbuja de lujos, en cuanto vi el mundo real, mi burbuja explotó y nunca volví a ser ese niño mimado — Changbin miró a Jeongin, parecía querer escuchar la historia completa, lo miraba con los ojos bien abiertos, con la curiosidad de un niño — Fue la nani que mis padres contrataron para cuidarme, era como una segunda madre para mi, era de un barrio pobre, y eran una familia muy grande, cuando le preguntaba por su vida, ella me explicaba como era el mundo... Desde entonces me prometí a mi mismo que yo debía ser alguien que cuidase de personas como ella, la asesinó un villano cuando yo era adolescente, fue horrible darme cuenta de que solo haciendo labor social y ayudando en asociaciones y refugios no iba a ser suficiente, así que... aquí estoy, tratando de ser la mejor persona que puedo, honrando la memoria de mi nana. — Jeongin puso la mano sobre la rodilla del chico, era todo lo que se podía permitir para mostrarle su apoyo — ¿Y tu pequeño zorrito? ¿Cómo fue tu vida antes de entrar a villano? ¿Pensabas en otras cosas antes?n

— Mi familia era como la de tu nana, grande y pobre, no había hueco para sueños en mi cabeza, yo solo quería crecer y tener un gran trabajo para que mi abuela pudiera descansar y mi madre no tuviera que cargar con tanto... Cuando ellos murieron todo mi mundo se vino abajo, todo lo que quería en la vida era para ellos, el dolor fue lo único que quedó. Soonie me encontró después de mi arranque de locura y me hizo un chocolate caliente y me abrazó toda la noche, Minnie y él son mi familia, vivo para verlos felices, es todo, si fueran héroes, yo sería héroe, si fueran vagabundos, yo viviría feliz debajo de un puente. — Changbin se levantó del suelo, tendiéndole la mano al chico, quién aun algo confundido aceptó la ayuda para levantarse del suelo.

— Eso es lo que necesitamos para sacar todo tu potencial zorrito, esa es tu motivación, ahí tienen que estar tus pensamientos cuando luchas, exactamente como cuando te volviste loco, querías justicia para tu familia y mira lo que lograste, controlar las mentes de miles de personas, eres increíblemente fuerte y si aprendes a manejar ese amor por tu familia, vas a ser imparable. Inténtalo ahora, a la diana pequeña, la que está más lejos, vas a apuntar ahí con todo, solo piensa en tus hermanos. — Exclamó Changbin feliz, llevaba días tratando de buscar la clave para enseñar a acertar a ese chico. Jeongin se paró sobre la marca de lanzamiento en el suelo, el recuerdo del cuervo rojo golpeando sin piedad a Minho llenó su mente. — Déjalo salir Innie.

DEAR VILLAIN - MINSUNGDonde viven las historias. Descúbrelo ahora