Cap. 26

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Al fin llegó el día del torneo, el clima era frío, la noche anterior había llovido en la ciudad por lo tanto ahora muchos de los estudiantes usaban suéteres y bufandas para no resfriarse, claro que Damián no, le encantaba este tipo de clima ya que le traía recuerdos del templo, la mayoría no muy buenos pero había otros que si valían la pena recordar, como ese día que aventuró el bosque y se encontró una manada de lobos, quienes a veces podía jugar con ellos, o esa vez que salió con su madre a entrenar y se tomaron un rato para descansar comiendo moras frescas de los alrededores, pequeños recuerdos que hacían extrañar su vida pasada, desde que llegó con su padre se ponía algo nostálgico en estas fechas.

En este momento Damian estaba trotando a altas hora de la mañana, faltan como dos o tres horas antes de alistarse para ir al autobús que los llevaría al torneo, pero por una extraña razón su corazón no dejaba de acelerarse, sus manos le hormiguean y sentía ese extraño sentimiento en su pecho, recordando sus charlas con sus hermanos, se negaba a aceptarlo, después de todo un soldado no puede estar nervioso y menos en una competencia.

Las horas pasan y Damián estaba alistando su mochila militar, tenía su traje de artes marciales listo (cortesía de Alfred quien le hizo uno al enterarse del torneo) llevaba toallas, agua, dos cambios de ropa, incluído un suéter y unos guantes para estar preparado, tenía también unos cuadernos ya que pensaba adelantar algo después del torneo, llevaba también su teléfono, cargador, sus audífonos y un pequeño botiquín por si las dudas, ya con todo listo fue al estacionamiento dónde había varios autobuses ya que no eran los únicos con eventos importantes.

  -Damian- Dijo Colin con una gran sonrisa alegre, acercandose al mencionado.

  -Walke- Dijo calmado.

Ambos chocan sus palmas para luego darse el puño como saludo, era algo nuevo que estaban probando pero les quedaba.

  -Que mal que tengas tu torneo cuando yo también tengo una competencia, te quería ver patear traseros a todos- Dijo Colin animado.

  -Si es una lastima,
¿Hoy es tu carrera no?- Dijo Damián calmado.

  -Si pero no sé cómo voy a hacer con este estúpido frío, me congelo hasta los pelos y eso que aún no estamos en invierno, me siento como en una nevera- Dijo calmado.

  -Ultimamente tu vocabulario a cambiado de tono- Dijo mirándolo con una ceja arqueada.

  -Disculpa, como han estado muy ocupados me uni al grupo de Freddy creo que se me están pegando algunas cosas jaja- Dijo algo apenado.

  -No importa mientas ses su forma de hablar lo único que se te pegue y no su idiotas, todo bien- Dijo calmado.

  -Jajaja sabes tu manera de hablar también cambio un poco, antes sonabas como un robot ahora estás más calmado- Dijo con una sonrisa.

Damián se extraño por ese comentario, al principio pensaba que eran su voz la que estaba cuando, ¿ahora su hablar? Iba a decir algo pero alguien más de une a la conversación.

  -Hola chicos- Dice Kim con una sonrisa acercandose a ellos- Por dios Wayne ponte un suéter o algo, hace frío, que no te enfermas facilmente no quiere decir que seas invulnerable a los gérmenes- Dijo algo molesta.

  -Ya tengo una mamá gallina no necesito otra gracias- Dijo entre sarcasmo y molestia.

  -Yo no soy una mamá gallina en todo caso sería una mamá Osa- Dijo algo molesta.

  -¿Mamá Osa?- Dijo Colin entre curioso y confundido.

  -Si la diferencia es que las mamás gallinas te dicen las cosas con todo el cariño del mundo, en cambio conmigo- Dice y le da un gran golpe en la cabeza de Damian- Lo haces por qué lo haces no importa como te lo diga, hace frío, ponte sueter- Dijo sería pero con una sonrisa.

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