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Hora de la madrugada, Damian por costumbren abre los ojos se estira ve a su alrededor, recordando que ya no estaba en su cómodo cuarto en la mansión, da un suspiro pesado y cansado, se levanta de la cama y da pequeños estiramientos, va al baño a arreglarse se pone una camisa manga larga negra, un mono del mismo color unos zapatos deportivos, sale de su habitación y baja las escaleras, luego sale de los dormitorios ve a su alrededor, el sol aun no salia, solo se podía ver algunos faroles encendidos al rededor, da otro suspiro empieza a trotar, lo hace al rededor de una hora media, llegando a un lugar aparado, rodeado de arboles y lo más importante, era mu tranquilo.

-Bueno, es mejor que nada- Dijo calmado.

Luego de eso empieza su entrenamiento, múltiples ejercicios, aparte golpeaba, pateaba y trepaba los arboles a su alrededor, eso le gustaba ya que le recordaba cuando entrenaba con su abuelo. Después de unas horas ve que a el sol había salido, miro su reloj de muñeca eran las 6:30am, normalmente a esa hora Alfred ya tenia su desayuno, así que decide ir a su habitación. En el camino de regreso pudo notar que ya varias personas estaban afuera, algunos haciendo ejercicio y otros simplemente caminaban, en su distracción un balón estuvo apunto de pegarle en la cabeza, pero gracias a sus reflejos rápidos pudo evitarlo.

-¡Perdón!- Dice un chico de cabellos castaño claros, ojos color miel, usando un conjunto similar al suyo solo que con deatalles blancos, con una sonrisa algo nerviosa se acerca a Damian- Lo-lo siento, estaba...estaba practicando con mi balón y creo que patee mal, perdón- Dijo nervioso y algo sudoroso.

-No tienes por que- Dijo Damian calmado y le da su balón.

-Claro que si, si el balón te hubiera golpeado la cara o algo no me lo perdonaría- Dice agarrando el balón- Soy Liam Lugman por cierto- Dijo extendiendo la mano con una sonrisa nerviosa.

-Damian Wayne- Dijo calmado.

-Lo sé todos hablan de ti, es decir no de ti realmente solo que eres un Wayne, es decir...bueno yo...mejor me callo- Dijo con una risa nerviosa.

-¿Ok?- Dice arqueando una ceja- Bueno me tengo que ir- Dijo serio pero calmado.

-Espera- Dice y se pone en frente de él- Solo...solo queria preguntarte...mmm.....¿en que equipo estas? es decir ¿Estas en un club o algo? ¿Algún equipo en particular o materia extra?- Dijo entre nervioso y curioso.

-¿Y por que debería darte ese tipo de información?- Dijo con los brazos cruzados.

-Tienes razón perdón por meterme no quería incomodar...mmm...bu-bueno mejor no te quito más tiempo, adiós- Dijo y se va rápido.

Damian lo mira irse y frunce en ceño confundido, para luego dar un suspiro y se va a su habitación, al llegar agarra una de las tasas de comida que le guardo Alfred, la calienta en el microondas, toma una botella de agua y una barra de proteína, con la comida lista se sienta en la cama a comer tranquilamente su desayuno, aunque muy dentro de él extrañaba llegar al comedor y escuchar el alboroto de sus hermanos.

Termina el desayuno y aun le quedaba un día más antes de iniciar con su jornada escolar, arregla todo y lo acomoda donde debe, al terminar se acuesta en la cama mirando al techo pensando en que hacer, normalmente en la mansión o estaría entrenando o con sus mascotas, en visa que no puede hacer ninguna de las dos cosas agarra un cuaderno de hojas blancas se pone a dibujar. Después de un largo rato su teléfono suena, y al ver era una vídeo llamada de Dick, rueda los ojos y acepta la llamada.

Vídeo Llamada

-Hola pequeño D ¿Como estas?- Dijo Dick alegre, detrás de el estaban Tim y Jason.

-Primero, No me llames así Graynson, Segundo ¿Para qe me llaman?- Dijo Damian serio.

-Vaya no puedes ser mas irritante- Dijo Tim con el ceño fruncido.

Vida AdolescenteDonde viven las historias. Descúbrelo ahora