Vida Adolescente

Cap. 27

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  -¡HAAAAAAAAAAAAAA!

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Todos quedaron en silencio por semejante grito, del cual venía del torneo femenino, dónde había varias chicas corriendo de esa misma sonar todas asustadas y aterradas por lo que pasó hace unos cuantos minutos atrás.

-¿Que susede?- Pregunto el árbitro confundido.

Y no era el único que se preguntaba eso, todos incluidos los de las gradas esperaban la respuesta a esa pregunta, la gente de seguridad se pusieron en acción, corriendo al área para saber que pasaba y en eso encontraron algo realmente sorprendente, una chica estaba la cual tenía sus puños con algo de sangre y frente a ella un chico todo golpeado con una gran sonrisa, mientras que la chica tenía una cara entre enojo y susto, con la respiración agitada no sabía bien que hacer, cuando los de seguridad intentaron apartarla ella se sobre salto y corrió del lugar.

  -¡Kim!- Dijo Damián al verla corriendo del lugar.

Sin pensarlo dos veces, sale del ring tras ella para detenerla, Kim estaba asustada, corria sin darse cuenta a dónde iba, salió del área del evento, salió del gimnacio y corrió por el estacionamiento, llendo a la calle.

  -¡KIM!- Grito tras ella.

Para luego lanzarse y así detenerla, evitando que un auto la atropellara, estubo muy cerca de provocar un accidente.

  -¡Kim reacciona!- Dijo Damián mirándola a los ojos.

Al decir eso pudo ver cómo sus pupilas estaban tan dilatadas que parecía como si hubiera visto algo que nunca en su vida tubo que ver, su respiración agitada, se notaba lo alterada que estaba...pero...a pesar de eso al ver los ojos verdes y brillantes  de Damian, sus ojos se llenaron de lágrimas y sin pensarlo lo abrazo con fuerza ocultando su cara en el pecho del chico.

  -Por dios ¿Están bien?- Dijo el señor muy preocupado, el cual era quien casi atropella a la chica.

Damián estaba estático, no era la primera vez que le pasaba, siendo Robin hubo varias casos dónde estaba en esta situación, dónde un civil inocente pasaba algo traumático y hacen lo que sea para estar en un lugar seguro, y al ser él un héroe siempre lo abrazaban o se escondían en su capa para sentir esa seguridad que les faltaba, pero esto es diferente, ahora solo era Damián Wayne quien estaba en esta situación, aun así no dejaría que su amiga estubiera en ese estado, así que correspondió el abrazo con calma y le acaricia suavemente la cabeza.

  -Ya, ya....todo estará bien....todo estará bien- Dijo con una voz calmada y serena, sin dejar las acaricias dulces que poco a poco la calmaban.

En eso pudo ver cómo su familia se acercaban a ellos preocupados, al ver a la chica en ese estado prefirieron no decir nada, se acercaron con cuidado para ayudarla, ella no quería soltar a Damián, por lo tanto tuvo que cargarla hacia a dentro del lugar, la llevo a la enfermería para que la atendieran, aun así no se despegaba del pecho de Damian, por lo tanto nuestro pequeño de ojos verdes no se aparto de su lado. Al llegar fueron directo a la enfermería,.dónde intentaron revisarla, pero al sentir otras manos Kim empieza a llorar, aferrándose más a Damián, haciendo imposible que se apartará, por lo tanto se quedó en todo el proceso hasta que terminaron de atenderla.

  -¿Que ocurrió?- Pregunto Damián preocupados.

Mirando a sus hermanos quienes previamente había entrado al lugar. Ya había pasado al rededor de tres horas después de lo ocurrido, en este momento Kim estaba dormida, su cabeza estaba en el regaso de Damian, resulta que estaba bien, nada grave por lo menos, tenía las manos algo lastimadas y también algunos pequeños moretones, hubo un momento dónde Kim no dejaba de llorar, tanto así que se quedó dormida por el cansancio, y para Damián verla así solo de daban ganas de matar al responsable de todo.