𝐈 𝐇𝐀𝐓𝐄 𝐓𝐇𝐄 𝐖𝐀𝐘 [𝐖𝐘𝐀𝐓𝐓 𝐗 𝐎𝐂]

28

Al finalizar las clases, Lizzie fue directo a una cafetería de Ciudad Zombie, no solo porque era su favorita y tenía hambre, sino también porque le había prometido a Morgan llevarlo y comprarle helado de chocolate, a veces se preguntaba cómo podía tener esa adicción por lo dulce y no tener diabetes.

—¿Lizzie?

La nombrada se giró a su derecha ante el llamado, encontrándose a primera vista con Stacey.

—Hola, ¿qué haces aquí?

—Vine con las chicas, quedamos en reunirnos para compartir ideas para nuestra coreografía —señaló su mesa donde estaban sus tres amigas.

—Cierto, la competencia, ¿cómo van con eso?

—Addison tiene mucho espíritu, pero siendo sincera, los alienígenas barrerán el piso con nosotros.

—¿Tan mal van?

—No poder usar la gravedad a nuestro favor es una gran desventaja, es como si ellos volaran.

Necrodopolis pensó un poco la situación al mismo tiempo que agarraba las dos copas de plástico desechable con helado y la animadora agarraba un plato, esos seres azulados eran los mejores en todo, pero solo porque lo aprendían con rapidez, no porque tuvieran experiencia.

—Es más, ¿por qué no vienes con nosotras? Nos vendría bien tu observación lógica y crítica contra tanta fantasía.

La castaña soltó una suave risa, era más que obvio que se refería a Addison y a su optimismo, pero no iban a decirlo en voz alta.

—De acuerdo, ¿qué dices, Morgan? —lo miró de reojo.

—Digo que mientras pueda comer helado, me da igual lo que hagas.

Su dueña negó con la cabeza divertida mientras seguía a la humana hasta su mesa, que le dejó el plato que había ido a buscar a Wells.

—Gracias, Stacey —le sonrió y notó a su cuñada llegar con ella —hola, Lizzie, ¿te sumas?

—Me enteré de qué estaban hablando y mi curiosidad pudo más —se sentó al lado de Bree y dejó que su gato comiera el postre de una de las copas.

—Entonces ya te enteraste de todo —comentó su acompañante con una sonrisa algo desanimada.

—Sí, pero estoy segura de que van a ganar, usualmente siempre nos salimos con la nuestra si Addison está de nuestro lado, ella jamás se rinde —la señaló con la cabeza y recibió una sonrisa en agradecimiento.

—Bueno, no voy a negar eso.

—Además, creo que usar las leyes de la física y gravedad a su favor debería ser considerado infracción, pero no inventé las reglas —probó una cucharada de su helado y se relamió los labios, apuntando el postre con la cuchara —mmm, este helado es realmente bueno.

—Cada día pienso más en cómo no solicitaste una beca en Mountain College, eres muy inteligente —comentó Lacey con la cabeza en una mano.

—Porque ni siquiera sé qué quiero hacer con mi vida, apenas decidí qué quiero estudiar. Además, creo que solo soy inteligente cuando quiero.

—Al menos es algo... —la de anteojos ladeó la cabeza.

La bruja se encogió de hombros sin darle mucha importancia y trató de no pensar en el tema, en su lugar, le dejó a Morgan una servilleta para que se limpiará el hocico de vez en cuando.

—Por cierto, Addison, tienes una cosa azul detrás -señaló su cuñada.

—¿Cosa azul? —se dió la vuelta y se encontró con A-spen, quién logró sacarle un susto y reaccionó igual.