Pablo:
―¡Para ya, tío, que vamos a chocar!―soltó Aurora y se aferró al asiento del copiloto.
―Debí aceptar que papá me enseñara―digo mientras volteo los ojos y la miro―. Ni siquiera he encendido el auto.
―Lo sé―responde Aurora y una sonrisa comienza a dibujarse en su rostro―. Solo estaba practicando.
Suelta una carcajada mientras me ve negar con la cabeza. Es difícil tomarme en serio las cosas cuando estoy con ella.
―Lo primero que tienes que hacer es apretar el embriague...
―Sé lo que tengo que hacer, mamá me lo ha repetido unas cien veces―la interrumpí y encendí el auto.
―Ya sabes que siempre se preocupa...
―Cien veces, hoy―la corté otra vez y eché a andar el auto―. Me lo ha dicho cien veces el día de hoy.
Aurora negó y se mordió el labio inferior para no sonreír.
―Fue peor conmigo, agradece que la que te está enseñando soy yo―dice y mira por los espejos y las ventanillas―. No lo haces para nada mal, novato.
―Me urge sacarme el carnet―respondí y por el rabillo del ojo me di cuenta de que Aurora tomaba su teléfono, era buena señal, significaba que estaba lo suficientemente relajada y confiaba en mi como para apartar la vista del camino mientras yo estaba al volante.
―Wow ―dijo Aurora después de unos segundos.
―¿Qué pasó?
―Se ha hecho viral otra foto de Pedri y Alex―respondió Aurora con una pequeña sonrisa y vi como llevaba el dedo índice y el pulgar hacia la pantalla del móvil para acercar la foto.
Sentí una pequeña picazón en el pecho.
―¿Ah, sí?―pregunté mientras veía por los espejos retrovisores, un auto blanco parecía desesperado por adelantarnos, así que le hice un guiñe para avisarle que podía―. ¿Y qué hacen en la foto?―el auto blanco me adelantó y vi como el copiloto sacaba el pulgar por la ventanilla, me está agradeciendo.
―Se están comiendo la boca.
Frené de golpe.
―¿Qué pasó?―preguntó Aurora mientras apartaba rápidamente la vista del teléfono y miraba alrededor. Fue una suerte que no hubiera nadie más en el camino.
―Una ardilla estaba cruzando―mentí y volví a encender el auto, la picazón era molesta y ahora me recorría los brazos.
―No seas tonto, por esta zona no hay animales―respondió y levantó una ceja―. A ti te pasa algo―no era una pregunta, era una afirmación.
―Sólo se me apagó el auto, todavía no domino el manejo por completo―seguí mintiendo y evitando a toda costa su mirada, lo cual podía hacer perfectamente porque estaba conduciendo y toda mi atención se la llevaba la calle, aunque estaba desierta.
―Te gusta―soltó Aurora simplemente.
Mi corazón se aceleró y supe que si la miraba en este momento... Sabía que si sus ojos se encontraban con los míos no podría negarlo, nunca pude mentirle a mi hermana.
―Pablo―dijo y la ignoré deliberadamente―. Detén el auto.
Pisé el acelerador y por los retrovisores vi que dos autos se colocaban detrás de mi. Aurora no dijo otra palabra, simplemente presionó la luz de estacionamiento, lo cual me obligó a orillarme.
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IT'S JUST A GAME
FanfikceElla ha perdido el control de su vida. Absolutamente todo lo que creía seguro de pronto parece haber desaparecido. Había tenido que mudarse de Manchester a Barcelona, dejar su casa, a sus amigos y comenzar una nueva vida. Él finalmente parece tener...