Érase una vez, un par de almas jóvenes e inexpertas destinadas a estar juntas que, a pesar de su inexperiencia e inmadurez, descubrieron que, aunque la vida tenga muchas sacudidas, el amor siempre puede triunfar.
Ramé es una palabra de origen libanés que se usa para describir que algo es muy caótico y hermoso al mismo tiempo.
Esa era la palabra perfecta para describir a Eddie, para describir a Amy y, sobre todo, para describir su amor. El cuál, a pesar del caos, fue perfectamente hermoso.
Y no, no vivieron felices por siempre, pero vivieron comprometidos con el amor que ambos habían construido. Entonces:
𝓥𝓲𝓿𝓲𝓮𝓻𝓸𝓷 𝓳𝓾𝓷𝓽𝓸𝓼 𝔂 𝓮𝓷𝓪𝓶𝓸𝓻𝓪𝓭𝓸𝓼 𝓹𝓸𝓻 𝓼𝓲𝓮𝓶𝓹𝓻𝓮...
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