Act. I. Knowing each other names

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You were raised by wolves and voices
Every night I hear them howling deep beneath your
bed
They
said it allcomes down to you
You're the daughter
of silent watching stones
You watch the stars hurl all their fundaments

In wonderment, at you and yours, forever asking moreYou are that space that's in between every page, every chord and every screenYou are the driftwood and the rift, you're the words that I promise I don't meanWe're drunk but drinking (Sunk but sin...

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In wonderment, at you and yours, forever asking more
You are that space that's in between every page, every chord and every screen
You are the driftwood and the rift, you're the words that I promise I don't mean
We're drunk but drinking (Sunk but sinking)
They thought us blind (We were just blinking)
All the stones and kings of old will hear us screaming at the cold

Romeo, Juliet & Cinderella

—Por favor úsala. Al menos un día a la semana.

—No, no quiero.

—Lily déjala, vas a atormentarla y aun ni siquiera ha llegado al colegio a que Severus la fastidie.

La mujer pelirroja retrocede con gesto exasperado y a quien hablaba, una niña de baja estatura y frondoso cabello negro sonríe amplia, con sus gafas redondas cayéndole por el puente de la nariz. Ella va dando saltos tras el hombre de sus mismos rasgos. Cabello negro, desordenado, denso; oscuro cual petróleo, incontrolable como el mismo; nariz pequeña, ojos redondos, pero en menor medida a los de su hija. La diferencia más marcada, es que él tiene ojos cafés mientras ella, tiene un impresionante color esmeralda.

Tan brillante que parecen parte de un hechizo. Apartados y con algo de privacidad, él se pone a la altura de la niña, tomándola de las manos.

—Vas a pasar mucho tiempo lejos de casa y sé que va a ser un poco complicado para ti—cuenta con delicadeza y ella asiente, aun sonriente y emocionada—, pero quiero que sepas que si necesitas ayuda, puedes enviar una carta. Te responderé tan pronto como pueda ¿Sí?

—Sí papá.

—Y Harriet—llama su atención de nuevo—. No importa la forma en que quieras mostrarte, hazlo ¿Sí? Que nadie te detenga de eso.

Asiente con la cabeza y ella lo abraza con fuerza, dejándose balancear de un lado a otro. James Potter da un suspiro, viendo hacia donde su esposa niega con la cabeza, acusándolo con la mirada. Al separarse, Harriet corre y sube al tren y se mantiene en el cristal hablando con su padrino Sirius Black.

James se para junto a Lily y la incomodidad se acentúa hasta el extremo. Como en cada momento donde él deja a su hija ser y Lily quisiera que pudieran un poco de presión. A final de cuenta, tiene la impresión de que James hace todo por hacer a Harriet comportarse como un niño.

Él quería un niño varón. Iban a llamarlo Harry.

Tan necio fue que la llamaron "Harriet".

Lily no tuvo problema con eso. Estaba feliz. Ella quería una niña y ¡La tuvo! Pequeñita, apenas pesando un kilo, demasiado frágil y enfermiza, pero con demasiado espíritu y con la capacidad de ser un terremoto en donde fuera. El problema empezó a surgir a los pocos años. El cabello largo le fastidiaba, no le gustaba usar vestido, tenía muchísimo interés en quidditch y se aburría con facilidad de todo lo que Lily consideraba bueno para ella.

Romeo, Juliet & Cinderella | TomrryDonde viven las historias. Descúbrelo ahora