— ¿Y el proyecto que quieres hacer es de?
— Aún no lo sé. Cuándo estaba en la universidad me interesaba mucho las empresa de softwares. Aunque se que hay que ser muy innovadooírla. — Yibo continuó explicando. Aunque al principio se sentía ridículo poco a poco sintió que la atención del hombre estaba sobre él. De manera que sólo un conocedor del área lo haría.
Zhan escuchó un poco de la conversación que Yibo sostenía con uno de sus socios. Wu Yitian era un reconocido empresario. Algo apatico a las conversaciones casuales, sin embargo Yibo se devolvía bien en el medio.
— ¿Pudiste concertar la reunión?
— Aún no. — Yitian palmeó el hombro de Zhan. — Tú asistente es simplemente brillante. Me estuvo comentando como le arrebataste las tres licitaciones a Beijing corporation. Eres un maldito estratega. Definitivamente no me equivoque en asociarme contigo.
— Eres un exagerado.
— No lo soy. Y por cierto, tienes un asistente brillante. Sabes que no me involucro en conversaciones que no sean productivas. — Entonces se dirigió a Yibo. — Sí algún día planificas bien tu idea. Me encantaría oirla.
— Oh. No me estás robando mi asistente. Me costo mucho conseguirlo. Es mio... — Dijo tan casualmente. — ¿Entonces que día podríamos concretar todas Los puntos del nuevo proyecto? Además tengo que presentarte los términos que conseguí en cada una de las licitaciones.
— Me encantaría... ¿Qué tal el viernes, 19? 4 de la tarde. Tengo un almuerzo en la ciudad. Así que...
Evidentemente Zhan estaba bromeando, pero Yibo se sonrojó por el comentario... Su mente se fue a otro lado y no percibió que Zhan estaba expectante de la revisión de su agenda. No sabía como había quedado después de haber programado varias reuniones ese día.
— ¿Yibo?
El doncel se congeló.
"Es mio".
Yibo quería meterse en un pozo por sobrepensar aquello que Zhan había dicho como broma y aún así se refería a lo profesional. Ademas...
¿Qué carajos?El podría estar enojado con Zhao Lin, pero no podía estar dando pie a otro hombre ni siquiera en sus pensamientos.
¿Cómo se sentiría si fuera Zhao Lin quien dijera eso sobre alguien más?
A Yibo se le formó un vacío en el estomago.
— ¿Yibo?
— ¿Ah?
El doncel lo miró angustiado como si el presidente Xiao pudiera leer sus pensamientos. Ciertamente, Zhan podía ver su rostro sonrojado.
— Viernes 19, 3 de la tarde. ¿Puedes asegurarte que no haya nada para esa fecha?
— Ah ... Ah... Claro.
Yibo tomó la agenda digital.
— Está disponible.
— Es perfecto. Entonces, quedamos para ese día.
Yibo tomó nota.
Ambos terminaron yendo al hotel. Yibo pensó que estaba bien tener el mismo auto. El mismo no se sentía muy cómodo manejando y Zhan y el se quedaban en el mismo edificio. Habitación una contigua a a la otra.
Zhan no pudo evitar preguntar.
— Yibo... ¿No tienes nada para mañana? De verdad, me ayudaste demasiado hoy. Con Yitian y los demás socios y conocidos. De hecho algunos quedaron muy impresionados con tu inteligencia. Como te dije... Creo que solo te hace falta actualizarte.