Alfa y omega se encontraban en la entrada de su casa, mientras Jungkook sacaba las llaves para poder entrar el omega detrás suyo veía la casa mientras se mordía el labio.
El anterior día Jungkook le había pedido que regresara, el rubio no pudo negarse después de ver esos ojos llenos de brillo con la esperanza de que aceptara y así fue.
- Mimi, si no quieres seguir en esta casa lo entiendo, puedo buscar una más bonita, si quieres la escogemos juntos, solo quiero que seas feliz y estés, estén comodos. - Dijo el alfa recalcando el "estén" mientas se colocaba detrás del omega para abrazarlo y colocar sus manos en su vientre plano.
- Pero Kookie, esta casa tiene mucha historia nuestra y muchos recuerdos. - Dijo mientras su aroma comenzaba a ponerse agrio, alertando al alfa de inmediato, quien se separó de él para ponerse en frente del rubio y colocar sus manos en sus mejillas.
- Ey ey ey, mi amor, mírame ¿Si? - dicho esto, el omega levantó la mirada conecatndola con aquella galaxia perteneciente al alfa. - Esa historia y esos recuerdos siempre estarán presentes aquí - dijo para colocar su mano en el pecho del rubio, justamente en donde su corazón se encontraba.
- Además, vayamos a donde vayamos, mientras estemos juntos, siempre habrá historia y nuevos recuerdos que crear. - se acercó y besó tiernamente la frente de su esposo.
El aroma del omega cambio, regresando a su habitual aroma dulce que tanto amaba el alfa, Jimin veía a Jungkook con ojitos brillosos y mejillas coloradas.
- ¿Sabes que te amo mucho? Eres mi vida entera alfa.
- Y tú eres la mía, omega hermoso.
Al escuchar estas palabras, el omega de Jimin empezó a mover la cola pues amaba esos halagos y más viniendo de su alfa.
Una semana después
Jimin estaba en el asiento del copiloto esperando a Jungkook, pues camino a ver su posible nueva casa habían hecho una parada exprés ya que al cachorro, según Jimin, se le había antojado una banderilla y su amado esposo no podía decirle que no cuando Jimin lo miraba con ojitos de cachorro.
- Aquí está tu banderilla amor. - Dijo el Alfa mientras le entregaba su antojo a un rubio que la veía con ojos brillosos y una gran sonrisa.
- Muchas gracias amor, ahora vamos a ver la casa. - dijo Jimin mientras disfrutaba el sabor de esa deliciosa banderilla.
- ¿Ya te abrochate el cinturón? - preguntó el alfa mientras se cercioraba de que así fuera.
- No me lo quité para nada Kook.
- Bien, entonces andando. - Jungkook arrancó el auto mientras colocaba su mano en el muslo del omega.
ESTÁS LEYENDO
Tʀᴀɪᴄɪᴏ́ɴ
FanfictionPara Jimin su vida era perfecta, tenía un esposo envidiable, el trabajo de sus sueños, un hogar maravilloso, pero lo que no sabía es que pronto todo ese sueños acabará con la llegada de su mejor amiga. - Park Jimin, omega de 25 años, modelo. - Jeon...