¿Amigas? (Rivers x tú)

3.

Llegamos a la fiesta, empezó la diversión, todos bailando, bebiendo, en pocas palabras perdiendo el control. Los más ebrios eran Roier, Ari, Osvaldo, Ama y yo. Las horas fueron pasando y cada uno se iba a su casa, Sam decidió acompañarme.

—Gracias por acompañarme, Sam.— dije mientras me reía, cuando estoy borracha me río de todo, hasta cuando no lo estoy.

—No hay de qué, no iba a dejar que te vayas sola en este estado, saca tus llaves.— pidió.— No creo que puedas abrir la puerta sola.

—Toma.— le entregué las llaves para que me ayudara.

Ambas pasamos y Sam me estaba preparando un café, me lo dio pero me quemé, ella se empezó a burlar y yo la miré mal. Después ya no me sentía tan mareada, nos pusimos a ver una película de terror, la película iba avanzando y el sueño me ganaba.

—Hey, será mejor que ya vayas a dormir, yo también ya me voy retirando.— avisó.

—Aún no acaba la película, un ratito más.— exclamé.— Te juro que no me va a ganar el sueño.— insistí.

—No te quedes dormida, pinche vieja.— amenazó.

—¿Cómo me dijiste?— pregunté desafiante.— Repítelo.

—Pinche vieja.— repitió mientras se reía.

Empecé a hacerle cosquillas, ella no paraba de reír, en cualquier momento se moría de la risa. Comenzó a suplicarme a que parara, así estuvimos un rato hasta que tuve piedad y ma dejé en paz.

—Casi me matas, pendeja.— se escuchaba cansada de tanto reír.— Nunca más te digo nada.

Terminamos de mirar la película y Sam ya no quería irse porque tenía miedo, le dije que se podía quedar conmigo, debería de aprovechar la oportunidad, ¿no?

Nosotras ya habíamos dormido juntas antes así que no sería raro que se quede en mi cama por una noche.

Estábamos echadas, ninguna podía dormir, ambas estábamos mirando el techo hasta que Sam voltea a verme.

—¿Qué pasó con Ama?— cuestionó de repente.— Estuvieron desaparecidas un buen rato, hasta creímos que les había pasado algo en el camino.— contó.

—No pasó nada.— cuando le respondí no la estaba mirando.— Ustedes saben que a veces llegamos tarde por cualquier cosa, nos quedamos en un parque.— contesté.

—Mírame y dime que no pasó nada.— pidió.— Por alguna extraña razón, siento que pasó algo más.— confesó.

—No paso nada, solo fuimos al parque donde ella organizó un picnic.— comenté.— Fue algo inesperado porque ni yo sabía que íbamos a tener un picnic, pero me divertí.

No dijo nada, pasaron algunos minutos, el silencio estaba siendo un poco incómodo.

—Y aparte de eso, ¿no pasó nada más?— siguió insistiendo en que le contara algo más.

—No, luego Ari llamó y nos fuimos.— hablé.— Se me hace raro que estés tan preocupada pensando que algo más pasó, ¿por qué tantas preguntas?

—Curiosidad.— contestó.

—

Cuando me desperté tenía un dolor de cabeza horrible, me tomé una pastilla, Sam ya había preparado el desayuno.
Cuando terminamos de comer, ella se fue a su casa porque tenía algunos pendientes.

En la tarde salí a caminar un poco, compré algunas cosas y ya cuando llegué a mi departamento me preparé para prender stream.