Delicious [Fonnie] FNAFHS +18

🍰; Incubus

^^
Hola, 🤘.

⭕Antes de leer⭕

Esta parte es el seguimiento de el primer extra que hice [🍓; Extra 1], para entender mejor esta parte te recomiendo pasarte primero a leer o volver a leerla para recordar de que trataba y así entenderla mejor, disfruten! <3 (espero)

⬜Contenido +18
⬜Lenguaje obsceno y grosero, (y mucho)
⬜Relacionado con la religión
(así que si eres sensible al habla de la religión,
por favor no dejar mensajes ofensivos y pasarte esta parte, gracias)
⬜Tentáculos
⬜ Incubo
⬜Mención de dorga y afrodisiaco
⬜Humillación y degradación de la persona
⬜BDSM

—Te lo dije Niño— dijo el hombre que tenia apariencia de vivir bajo un puente, viendo al chico joven que le rogaba de rodillas.

—Por favor! Se lo ruego! Démela de nuevo! Necesito verlo!— un pelimorado desesperado gritaba al hombre extraño; las personas que pasaban por ahí solo se quedaban viendo con duda y lastima el cómo gritaba.

Bonnie estaba al borde del llanto por la desesperación, le ofreció todo lo que pudo para volver a tener esa pastilla, ofreció cosas que hasta ni debería pero no importaba, no importaba ahora, solo quería volver a verlo, quería verlo.

De rodillas y manos juntas suplicando al hombre que solo se burla de él.

Jamás pensó que estuviera haciendo eso, que le estaría rogando a un hombre mayor que posiblemente vivía en el cubo de basura que se encontraba.

—No sabe cuanto lo necesito...— dijo con voz  quebradiza.

—Oh si, si lo se Niño, estuve igual a tu edad con una hermosa demonio de grandes pechos. Oh Britney, tan hermosa Que era...— dijo el hombre con la Mente en las nubes recordando a su amante demonio de la juventud.

Pero sus pensamientos se fueron cuando empezó a ser movido de un lado a otro, era Bonnie que lo sacó de sus pensamientos, estaba al borde del llanto y estaba enojado, frustrado.

—No me cuentes tu vida viejo! Si ya sabes como se siente entonces dámela! Dámela! Ya te ofrecí de todo! Que quieres! Dímelo! Pero por favor, dámela la necesito...— rogaba cuando soltó de mover al vagabundo.

—Oye mocoso! No necesito nada, yo? Yo soy el éxito!— dijo con grandeza el hombre.

—El éxito no viviría en un montón de basura! Si fueras el éxito vivirías en una mansión y serías millonario, ellos lo tienen todo— dijo rodando los ojos empezaba a molestarse cada vez más.

—Todo menos esto— dijo sacando una bolsita con algunas pastillas con ese color peculiar que reconocía, Bonnie jadeo al verlos —Los millonarios jamás podrán ofrecerte esto—