El día de la esperada cita había llegado y Carina llevaba nerviosa todo el día, se había cambiado varias veces de ropa, repitiéndose una y otra vez que solo era una cita con Maya, no significaba nada, pero era mentira, lo significaba todo, en aquella cita se vería si tenían posibilidad de seguir como pareja o el seguir intentándolo era un caso perdido.
Y por eso, se había cambiado varias veces de ropa, como si su atuendo fuera a equilibrar la balanza cuando sabía perfectamente que no era así, pero tenía que tener bajo control algo, aparte de que se sentía tan nerviosa como si fuera su primera cita con Maya. Aunque si lo pensaba bien, en cierto modo podía serlo, la primera vez no habían tenido citas, habían pasado de tener sexo juntas a trabajar y directamente a irse de viaje juntas, su comienzo había sido un poco como una montaña rusa, al igual que su matrimonio.
Carina llegó a la estación de bomberos donde había quedado con Maya, tenía turno con el camión sanitario pero se preveía un día tranquilo. Al llegar Carina notó una gran tensión en el ambiente, fue a la cocina y encontró al equipo limpiando, parecía como si hubiera llovido dentro de la cocina
-¿Todo bien? -preguntó Carina
-¿Te has perdido? -Andy se acercó y le dio un abrazo
-Había quedado con Maya, ¿no está? -Carina se dio cuenta que no estaba con los demás
-Está en el vestuario, ya sabes donde queda
-¿Tú estás bien? Tienes cara de pocos amigos
-La capitanía de Theo está siendo más problemática de lo que esperábamos -Andy bajó la voz para que sus compañeros no la escucharan-. Pero bueno, no te preocupes por eso y ve a buscar a Maya
Carina fue hacia los vestuarios, saludando a aquellos que le decían que se alegraban de verla, al entrar no encontró a Maya, se dirigió al baño y llamó. Maya le abrió la puerta y la miró sorprendida
-¡Carina!
-¿Por qué pareces sorprendida? Habíamos quedado para nuestra primera cita... ¿lo has olvidado?
-No, claro que no -dijo Maya con una sonrisa-. He de confesar que creí que lo suspenderías a última hora. Pero estoy muy contenta de que finalmente podamos hacer esto -Maya le dedicó una sonrisa divertida-. Es Karen, ¿verdad? ¿DeLinka?
-DeLuca -Carina sonrió por lo payasa que podía ser Maya cuando se lo proponía
-Cierto, cierto. Permíteme hacerte un recorrido, dra DeLuca, ¿alguna vez has estado en una estación de bomberos?
-No... creo que no -dijo Carina siguiéndole el juego
Maya le había hecho un tour por el parque a Carina, la doctora no podía dejar de mirar a Maya, cuando sonreía era hermosa, recordaba la primera vez que la había visto en aquel bar, cuando vio su sonrisa por primera vez no quiso dejarla ir, ahora le pasaba lo mismo, le daba igual el plan, lo único que quería era ver esa sonrisa que le llegaban a los ojos. ¿Cuánto hacía que no la veía sonreír así? ¿Cuánto que no bromeaba y la hacía reír?
Entraron en la cocina donde Vic y Andy estaban haciendo la comida
-Andy, Vic, os presento a mi cita, la dra DeLuca
Carina la miró sorprendida de que siguiera con la broma delante de sus compañeras
-Dra DeLuca -Vic le tendió la mano muy seria, siguiendo la broma de Maya-. ¿Qué especialidad realizas?
-Gracias por los cannolis, dra DeLuca -interrumpió Andy-, hemos tenido un contratiempo con el menú de hoy, pero combinan perfectamente con la cena
Carina iba a responder cuando su teléfono sonó
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Rompiendo las reglas
FanficLas reglas estaban claras, cada miércoles se verían y tendrían sexo, nada de sentimientos, nada personal, las dos mujeres ni siquiera sabían el nombre de la otra. Pero el destino hace de las suyas, y Carina DeLuca, doctora del Grey Sloan Memorial c...