𝟬𝟭𝟳

376 33 3
                                    

Narra lysandra.

Estábamos en nuestro "comedor" teníamos los sonidos de las hojas de los árboles que nos rodean. Estaba hablando con mi hermano y mi primo sobre nuestra misión, que no sabemos que se supone que debemos hacer, no hay misión de peligro para mestizos que creará una fisura. El viento movía los cabellos sueltos de mi trenza.

Vi que Alek se acercaba a donde estábamos, le di una pequeña sonrisa y el me la devolvió con cuidado, cuando estuvo en nuestra mesa se ubicó detrás de mi y colocó sus manos en mis hombros, dejando un pequeño beso en mi coronilla. El podía tener una ara de amargado pero el era madamas ni nada menos que perfecto, era un caballero. Se aclaró la garganta y dijo nervioso no viéndome a mi, si no viendo a mi hermano.

—Nico, me gustaría pedirte permiso para llevar a Lysandra a una cita.

Nico, conocido por su mirada intensa y su protectora naturaleza sobre conmigo, evaluó a Aleksander en silencio durante un momento que pareció eterno. Finalmente, asintió con solemnidad, no se podía olvidar que el era mi novio después de todo.

—Está bien, Aleksander, pero escucha con atención. Lysandra es mi hermana, y su seguridad es lo más importante para mí. Si haces algo para lastimarla, tendrás que lidiar conmigo.

Aleksander asintió con gratitud, sintiéndose aliviado por haber pasado esa prueba crucial. Luego, se volvió hacia mi, con una sonrisa que brillaba con esperanza.

—Entonces, ¿qué dices, bonita? ¿Te gustaría tener esa cita conmigo?

Yo le sonreí con entusiasmo.

—¡Claro, me encantaría, Alek!

***

Nuestra cita transcurrió en un hermoso bosque cercano a nuestro refugio. Los rayos dorados del sol se filtraban a través de las hojas de los árboles, creando un ambiente mágico. Ambos caminábamos de la mano, disfrutando de la serenidad del lugar y la mejor compañía, que era de del otro.

Mientras caminábamos compartíamos historias de nuestras vidas, nos conocíamos un poco más. Obviamente no era de extrañar que Alek tuviera más historias que yo, el era mucho mayor que yo, por varios años. Aunque parece de 20 años y yo tenga 16 casi 17. Las risas llenaban el aire y creaban un vínculo especial entre nosotros

De repente, escuchamos un crujido de hojas y el sonido de cascos de caballos resonaron a lo lejos, ambos nos detuvimos y Alek me jalo a unos arbustos haciendo que nos agacháramos. El me hizo un sonido de silencio. El se levantó un poco y vio.

—son hombre del rey.

Nos quedamos escondidos hasta. Que dejamos de oir los caballos y salimos con cuidado.

—Nuestra cita se volvió mucho más emocionante de lo que esperaba.—le dije

Aleksander asintió, con una chispa de emoción en sus ojos.

—Eso es cierto. Pero estoy dispuesto a enfrentar cualquier aventura contigo, Lys

Seguimos caminando de vuelta al escondite, y decidí decirle a Alek.

—Me encanta ser tu novia

—¿Novia? Te estoy cortejando.—me dijo confundido

—Por eso. Entonces eres mi novio

—¿Novio? ¿Que es eso?

Ella se rió.

—Si me cortejas, estamos en una relación, eres mi novio y yo tu novia.

—Está bien, me gusta. Primero somos novios y luego esposos.

Yo quede sorprendida con lo que dijo y solo lo bese en mitad dls bosque

Esposa del general KiriganDonde viven las historias. Descúbrelo ahora