Esposa del general Kirigan

𝟬𝟮𝟲

Narra Aleksander.

Si hace 130 años, más o menos que es mi edad me hubieran dicho que estar casado era lo mejor del mundo, lo hubiera hecho a mis 20, no hubiera esperado tanto...bueno espere ya que no había conocido a la indicada, ahora ya la conocí y estoy tan feliz por decir que mi esposa es, Lysandra Di Angelo de Morozova. Mi Moya Soverenyi, y yo soy su Sasha.

Íbamos caminando por bosques tomados de la mano, llevábamos unos meses de matrimonio, no como ahora que llevamos dos años de matrimonio...ella me dijo que le gustaba mucho mi nombre, pero que me quería encontrar un apodo que solo fuera de ella.

Sonreí como un tonto a recordar porque comenzó a llamarme así.

—¿Te puedo llamar Sasha?

Me pregunto mientras íbamos de la mano por el bosque.

Yo asentí mientras sonreía

—Solo tú puedes llamarme así mi Lapuska.

—¿Y yo soy tu Lapuska?

—Siempre lo serás, solo tu.

—Solo yo.

Bese con cabeza.

—Tu eres mi Lapuska y yo soy tu Sasha.

Sonreí como un tonto enamorado y que era lo que soy, alguien fielmente enamorado de ella.

—Sasha, ¿me ayudas?

Fui hasta donde estaba ella, le quite el peso de las manos y lo cargue yo sobre mis hombros.
Ambos fuimos caminando lado a lado, dejé la Leña en el lugar que correspondía y abracé a mi esposa mientras besaba su cabeza.

—Te amo Lapuska.

—También te amo mi Sasha.

—Te molestaría si vamos al cuarto.

—¿Que vamos a hacer ahi?—pregunto viéndome pícaramente.

—Lo que queramos, mientras sea que yo esté entre tus piernas.—dije mordiendo su oreja

Ella colocó sus manos en mi abdomen cubierto y lo acarició.

—Vamos...

Ella me llevó de la mano a nuestro cuarto, cerró la puerta y yo tome el control, ella conoce las reglas, en la cama yo mando, fuera de ella soy su esclavo.
La arroje a la cama y se rió cuando abrió sus piernas y yo me ubique a en el medio. Le quite la keftas y comencé a besarla mientras acariciaba sus piernas.

—ALEK, LYS.

Fue el grito de Percy detrás de la puerta.

—Quédate aquí.—le dije a mi esposa.

Abrí la puerta un poco que no vieran a Lys como estaba.

—¿Que sucede?

Percy se Rio.

—Lamentó que estes ocupado, pero el rey conoce donde esta nuestra sanadora.

Yo mire sorprendido.

—Prepara los caballos, iremos los cuatro rápido a proteger a nuestra amiga.

Entre y vi a Lys

—Tendremos que dejar esto para después, los del Rey encontraron a Helene, debemos ir a ayudarla.