Esposa del general Kirigan

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Narra Aleksander.

Habían llegado rumores sobre una supuesta grisha que se esconde en el bosque en una cabaña, íbamos a ir a averiguarlo. Tenía tres caballos afuera para mi y los tres mestizos, solo había sacado 3 ya que pensaba ir con mi chica en un mismo caballo.

Vi que se aproximaban a donde estábamos, venían en silencio. Apenas se detuvieron vi a mi chica que vio a los caballo raros.

—¿Falta un caballo?—dijo.

—Bueno... estaba pensando que quizás...te gustaría ir conmigo.—mire a Nico al lado de su hermano que no me veía muy bien que digamos.—Solo si tu hermano deja y tú estás de acuerdo.

Nico me vio y solo bajo la vista a su hermana.

—¿Quieres ir con el o prefieres conmigo?

Ella lo vio.

—Si voy con mi novio, prometes no abrir un agujero en el suelo o que salgan esqueletos del suelo.

—Lo prometo....a no ser que tú me digas que lo haga.

Ella me vio y se acercó a mi, se empinó y dejó un beso en la comisura de mis labios, donde estaba mi barba (se que antes de la sombra no tenía barba, pero se me hace muy sexy con barba)

—Iré encantada contigo.

Yo le sonreí, sujete su cintura y la alce para subirla al caballo. Cuando ella estuvo acomodada yo me mórente detrás de ella, la abracé por los hombros y tome las riendas del caballo. Nos fuimos los cuatro y nos adentramos en el bosque.

Caminamos muchas horas tanto que se hizo de noche.

—No creo que encontremos nada a esta hora. Deberíamos volver.—dijo Percy.

—No tan rápido, miren haya.

Nico con su buena visión nocturna señaló a donde había una luz tenue y cálida. Dirigimos los caballos por los árboles y pudimos encontrar una cabaña de asilado oculta.

A las afueras de la cabaña, encontraron a una mujer elegante, de cabello oscuro y ojos penetrantes, que disfrutaba de la tranquilidad de la noche.

Todos habíamos acordado en el camino que si la habitante era una mujer, Lysandra hablaría con ella. Yo me baje del cabello y la ayude a ella a hacerlo, cuando estudié en el suelo me beso en la mejilla.

Extraño que me bese en los labios.

Antes de que ella se fuera la sujete de la muñeca y la pegue a mi pecho, le dejó un suave pico en los labios y la vi a los ojos.

—Te amo.—le dije

—Yo también lo hago, te amo Alek.—me dijo y con cuidado me volvió a dar un pico.

Ella se alejo con una sonrisa y se acercó a la señora.

—Disculpe, ¿usted vive aquí ? Soy Lysandra, y este es Aleksander mi novio, mi hermano Nico y mi primo Percy. Somos del refugio de grishas.

—No deberías decirle eso a desconocidas.

—No eres desconocida, sabemos que eres una grisha...al igual que nosotros

—Soy Helene, soy sanadora.-dijo con cautela.

—Alek y yo somos invocadores de sombras.—Dijo mi chica con cautela.—Mi hermano es mortificador, es parecido a ti, solo que tú sanas y el invoca a los muertos...por último percy es un Agitamareas

—¿Qué les trae al bosque en esta hermosa noche?—pregunto Helene.

—Sabíamos o escuchamos de ti, queríamos comprobarlo todo...para invitarte a nuestro refugio.

—El bosque es un lugar mágico y lleno de sorpresas. No es común que tengamos visitas en esta zona, pero estoy encantada de conocerlos. Su ofrenda es fascinante, pero el bosque es mi hogar. Podemos ser amigos y yo les puedo ayudar, pero me quiero quedar aquí en mi cabaña

Lysandra no me vio y solo dijo.

-Claro que puedes hacerlo Helen, cuando necesites algo siempre eres bienvenida.

La plática se terminó y ella se acercó a nosotros, la volví a ayudar a subir al caballo y mientras nos devolvíamos en la noche, siguiendo las órdenes de ella y su hermano en la oscuridad le dije.

—Eres buena líder.

—Gracias.

Dijo y se recostó en mi pecho y se cubrió más con mi capa.
Pasaron los minutos yNico vio a su hermana.

—¿Se durmió?

Yo baje mi vista y la encontré a ella acurrucada en mi cuerpo con los ojos cerrados y respirando pausadamente, esta hermosa mi chica.

—Así es