Eres la Estrella de mi Universo

Cap. 15

Stella

Al dar las doce el reloj, mi casa se había vuelto un caos. Desde temprano mi madre había empezado los preparativos para irnos en la tarde y con el pasar de las horas su humor fue decayendo. Ahora estaba en modo control total. Ya me dolía la cabeza por escuchar sus gritos.

«¡Michael, ponte el esmoquín!»

«¡Liam, al baño, ¿estás esperando a que te mandé?!»

«¡Loki (nuestro perro), deja eso!»

«¡Stella, ve a peinarte!»

Dios...me sentía en el ejército. Aunque debo admitir que su mandadera obtuvo resultados, porque cuando marcaron las una y media ya estábamos todos listos. Mi papá y Liam ya estaban con sus esmoquins y peinados; mamá y yo teníamos nuestros vestidos puestos y nuestros cabellos arreglados.

No es por nada, pero cuando me ví en el espejo estaba hermosa. El vestido color azul resaltaba en mi piel, y los zapatos de tacón bajo me quedaban perfectos. Me había hecho una trenza en el cabello y me había aplicado un sutil maquillaje. No me puse labial, no me gustaba.

Miré mi celular para ver si tenía algún mensaje de Sam. No había nada. Admito que me desilusioné un poquito, pero borre inmediatamente eso de mi mente. Él no tenía que mandar ningún mensaje, solo éramos amigos. A lo mejor no tenia señal, o lo estaba cargando, o...

Estoy pensando mucho.

La puerta de mi cuarto se abrió y mi papá entro con cara de pocos amigos. Se había quitado el corbatín y el saco, dejando ver la camisa blanca que tenía debajo.

—Estas cosas si dan calor— Dijo desabrochando dos botones de la camisa frente a mi— Ese amigo tuyo, ¿a qué hora vendrá?

—Le dije que viniera a quince para las dos, debe estar de camino.

—Son la una y cuarenta. Si no ha llegado para cuando nos vayamos, lo voy a...

El timbre de la casa llegó a nuestros oídos. Papá y yo nos vimos el uno al otro. Solo estaba pensando en una cosa: «El primero que llegue le dará la bienvenida». Mi papá debió pensar lo mismo porque salió corriendo por la puerta. Me pare rápidamente y lo seguí, pero mi velocidad no era la usual por los estúpidos zapatos.

Maldito tacón.

Bajamos las escaleras, yo detrás, él adelante. Una carrera de velocidad al nivel olímpico a través de la casa Parker. Pude escuchar claramente al narrador deportivo.

«Y entonces Stella va pisandole los talones a su padre, pero él no da su brazo a torcer ni se rinde, sino que sale corriendo incluso más fuerte. Wow, que rapidez. A pesar de su edad corre como si tuviera la edad de Stella y su energía; creo que eso es lo que pasa cuando eres policía y persigues criminales casi todos los días, ¿no? Michael va ganando, creo que tenemos un ganador...¡pero miren que ha pasado! ¡El perro de la familia se le ha atravesado en el camino y el policia a caído de bruces contra el piso! Stella también se encuentra con el perro, pero lo salta con habilidad. Ha ganado, Stella Parker ha ganado. Se ha hecho historia señores, ¡historia!»

Si, mi imaginación es muy vivida. Mi papá estaba en el suelo gritándole a Loki, mientras el pobre lo miraba sin entender que había hecho. Tuve compasión, no por mi papá, sino por el perrito que seguro tendría que pasar la noche afuera como castigo; aunque bueno...mi mamá lo iba a dejar entrar apenas mi papá se durmiera.