The kingdom of nothing. [+18]

GUERRA, PRIMER AÑO "Acto dos"

Septiembre de 1997, Bosques de Gran Bretaña.

Se fueron al amanecer. Cuando nadie veía, cuando nadie podía intervenir, convencerlos de no marcharse.

El grupo se encontraba en silencio, Amelia los guiaba directo al traslador, afuera del terreno de la mansión. Podía sentir el frío otoñal calar sus huesos, el viento chocar en su rostro, sintiéndose extraña, intranquila.

No era por el hecho de haber decidido no despedirse de nadie, ni siquiera de Tom. Sino, era el hecho de que sentía que salir de los terrenos protegidos de Voldemort no era lo correcto.

Miró a lo lejos la mansión, con un nudo en su pecho y su garganta arder, pero no sé detuvo, no hasta que llegaron al traslador, ni siquiera se permitió dar un respiro y observar a cada uno.
Tomó el traslador, y sin mirar a nadie susurró:

-No se separen de mi -Amelia les ordenó -, Nos adentraremos al bosque, tomaremos a Percy Weasley y nos iremos de ahí.

Todos asintieron.

-Si hay algo mínimamente extraño, entonces regresaremos, y en unos días volveremos -susurró, alzando su mirada y notando como cada uno la miraba determinado -, Somos familia, y hago esto por ustedes. Una vez terminemos con esto, ustedes estarán a salvo.

Blaise sonrió.

-Nos amas tanto... -la molestó.

Ella no lo negó. Sonrió suavemente, y lo que hizo, fue tomar el traslador con sus manos temblando, ella observó a Pansy, la respiración de su mejor amiga era un desastre, pero tomó decidida aquella copa de oro.

Amelia notó, que todos esperaban únicamente a qué Pansy se aferrara al traslador, para así estar seguros de hacer esto, de cumplir con aquella estúpida misión.

Ava y Adam tomaron la copa. Pansy mantuvo su mirada fija en Blaise, convenciendolo de tomar el traslador, y fue cuando el moreno tocó el material, que todos desaparecieron en un chasquido.

Fue enseguida cuando el traslador los llevo a su destino. Pero el problema, el enorme problema, había sido que se encontraban en el lugar equivocado.

Se suponía que la dirección era a las afueras de Londres, cerca de una estación de autobuses muggle. Pero se encontraban en el bosque de Gran Bretaña, en medio de la nada, rodeados de cortezas de árboles, un camino rocoso y silencio absoluto.

Sintió como todos se tensaron, y el pánico comenzó a invadirlos.

-Amelia... -Pansy jadeó -, ¿Dónde estamos?

Ella respiró hondo.

-Estamos en el bosque -Adam susurró -, No se supone que debíamos aparecer aquí.

Sintió el aire atascarse en sus pulmones.

-Amelia... -Ava dijo con un hilo de voz -, ¿Qué hacemos en el bosque?

Ella no se movió, no hasta vulnerabilizar su magia y buscar algunos intrusos cerca, pero ella no sintió nada. Era como si se encontraran en el vacío, aún pisaran el bosque, Amelia se sentía fuera de lugar, extraña.

-Tomemos el traslador -Blaise propuso, acercándose a la copa de oro -, Deberíamos regresar.

Amelia asintió. Era buena idea, Voldemort no le había dicho nada sobre ningún bosque, y sabía que el no enviaría a su espectro a la nada, no la pondría en peligro porque no le convenía perderla.

Ella observó a Blaise extender su mano... pero en el momento que el tendió su mano para tomar el traslador, este explotó, hiriendo el brazo de Blaise en el proceso.