Sexto año "Nada es lo que parece"

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Marzo de 1996, Hogwarts.

Ella gritaba.

Sentía como Hermione la curaba, como sacaba aquellos clavos incrustados en su piel, como cerraba sus heridas y el sangrado cesaba poco a poco, lentamente.

Fred la había llevado a un escondite de los tantos que conocía en Hogwarts, colocaron un hechizo silenciador para evitar que los estudiantes oyeran sus terribles gritos. Y la observaba con el rostro pálido, sin moverse, como si no quisiera arruinar nada, como si el hecho de no moverse... no parpadear, ayudase a Amelia a dejar de sufrir.

Pero sabía que Bellatrix Lestrange le había dejado heridas internas graves, eran las que más dolor le causaba, era agonizante.

Y, aunque ella sabía que tanto Fred como Hermione no tenían ni la más mínima idea de lo que sucedía, ella decidió hablar. Era momento.

-Me han castigado... -dijo entre sollozos a causa del dolor infernal que sentía -, Ellos me han castigado...

Fred había fruncido su ceño y miró a Hermione y busca de respuestas, la castaña no le regresó la mirada, estaba curando a Amelia, estaba concentrada... pero escuchaba, y eso era suficiente para ella.

-¿Quienes te han castigado? -preguntó Fred con un hilo de voz.

Amelia tomó aire una y otra vez, mientras sentía el dolor ardiente de sus huesos que estaban rotos regresar a su lugar. Apretaba sus dientes y gritaba, pero se aferró a seguir hablando.

-Voldemort.

Incluso Hermione se detuvo.

-Amelia, entiendo que el dolor te haga alucinar, suele... -intervino Hermione.

Ella sollozó desesperada.

-¡Maldita sea Hermione, no estoy teniendo alucinaciones! -le gritó -, ¡Estoy intentando ser honesta con ustedes!

Fred y Hermione se quedaron atónitos.

-Asi que si, mierda... -gimió de dolor -, Voldemort me ha castigado.

Hermione jadeó.

-¿Por qué...? -balbuceó la castaña -, Estamos en el castillo, Voldemort no pudo haber entrado sin ser notado...

-Dumbledore. -espetó Amelia.

Estaban confundidos, aterrados incluso. Pero Hermione se obligó a moverse, pues Amelia aún seguía herida. Curó el resto de sus huesos rotos, ella gritaba, se retorcía y sollozaba del dolor, incluso el oír el crack de sus huesos nuevamente unirse era aterrador.

-No entiendo... -susurró Hermione, quedándose quieta nuevamente.

Amelia cerró sus ojos, sintiendo como poco a poco el dolor se calmaba, como Hermione de nuevo le había salvado la jodida vida.

-Soy doble agente -les dijo -, Ese es mi trabajo en la orden.

Ambos se quedaron atónitos, la miraban como si de todas las posibilidades, ser doble agente precisamente hubiese sido la menos probable.

-Amelia... -jadeó Hermione -, Yo... debí saberlo.

Amelia negó con su cabeza.

-Se que el año pasado hablamos sobre cómo Dumbledore estaba interesado en mi, en trabajar para la orden... -aceptó Amelia -, Pero no podías saberlo, ese es mi trabajo... que nadie en la orden sospeche.

-Dumbledore no es tan cruel... -susurró Fred -, ¿Verdad?

Amelia soltó una risa amarga.

-¿Crees que si no fuera cruel estaría en este lamentable estado?

The kingdom of nothing. [+18]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora