Capítulo 4

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Ya llevaba un par de minutos mirando un punto fijo en mi habitación sin saber nada sobre Cristal, de repente escuché que la puerta era abierta, pensando que sería Magnus con noticias de Cristal miré en esa dirección, pero al ver que era Maryse, volví la vista a donde estaba. Decir que estaba molesto era poco, durante 12 años pensé que era parte de la familia Lightwood, en todo ese tiempo consideré a Maryse y Robert mis padres y a Alec, Isabelle y Max mis hermanos como para que ahora todo esté empezando a derrumbarse.

- ¿Cómo está? – preguntó Maryse rompiendo el silencio.

- ¿Qué quieres? – evadí la pregunta.

- Quiero hablar contigo.

- No hay nada de qué hablar – dije volviendo a mirarla.

- Creo que sí lo hay... Max tiene razón, no eres su hermano – dijo logrando que la viera con confusión.

- ¿Qué?

- Tenías 10 años cuando llegaste... no tuvimos más opción que aceptarte – dijo empezando a acercarse a mí – pero de haber sabido que eras un demonio... habría hecho esto hace años.

Cuando menos lo esperé, me arrojó un hacha que a duras penas pude esquivar, la vi clavarse en uno de los estantes para luego ver a Maryse venir hacia mí con su espada, cuando intentó clavármela, la esquivé al mismo tiempo que sujetaba su brazo para mandarla al suelo logrando que se golpeara la cabeza.

***

Clary:

Este día va de mal en peor, primero Simon besa a Maia en nuestra primera cita oficial, luego Isabelle no quiere darme un concejo de esta situación y ahora Magnus no me deja darle a Simon la golpiza que se merece para luego decirme que alucino y me deja en un rincón. Cansada de la actitud de todos, me dispuse a irme cuando me topé con Alec en la salida.

- Oye ¿Ya te vas? – me pregunté y voltee a verlo.

- Tengo que... ya no soporto ver a mi supuesto novio besándose con otra frente a mis narices – dije furiosa - ¿Has visto a Cristal? No quiero que sienta la necesidad de matar a Simon.

- ¿De qué estás hablando? – preguntó confundido.

- Alec ¿Estás bien? – pregunté preocupada al verlo asustado, sin responder Alec se fue en dirección contraria – Alec... Alec...

- Lo siento... tienes derecho a odiarme – dijo acelerando el paso, pasé en frente del taller de Magnus y vi que de este salía Cristal, quien vio a Alec en ese estado.

- ¿Qué le pasa a Alec? – preguntó confundida.

- Quédate aquí – le pedí antes de seguir detrás de Alec.

- Pero Clary...

- ¡Quédate aquí! – le grité viendo como retrocedía asustada para luego ir corriendo a la fiesta, me arrepentí al instante y quise ir con ella pero Alec era más importante en estos momentos por lo que fui por donde él fue rumbo a la terraza, en cuanto salí me llevé la sorpresa de verlo sobre la cornisa – Alec... ¡Alec no!... Alec ¿Qué estás haciendo? Me estás asustando.

- ¡Alec! – voltee viendo a Cristal.

- Cristal, sal de aquí – dijo Alec con la voz rota.

- Pero... - dijo asustada mientras caminaba hacia Alec.

- Cristal no te acerques – le dije y aproveché que estaba cerca para susurrarle – a mi señal, ponte debajo de la cornisa y atrápalo en caso de que haga una locura.

Shadowhunters: Sin pasadoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora